Presentarán últimos avances científicos del INTA

En el próximo número de la Revista de Investigaciones Agropecuarias (RIA), el último del año, «se darán a conocer avances en materia científica capaces de abordar problemas que hoy están presentes en materia social, sanitaria, productiva y ambiental y que podrían acrecentarse con el paso del tiempo», dijo Inta Informa.
Ocurre que «investigadores argentinos buscan desarrollar nanoanticuerpos de llamas VHH presentes en leche de vaca para combatir de manera efectiva el rotavirus humano, enfermedad diarreica que es la segunda causa de muerte en el mundo en niños menores de cinco años».
Para combatirla, descubrieron que «las moléculas derivadas de los anticuerpos de los camélidos son las más pequeñas que existen en la naturaleza capaces de reconocer a otra y de neutralizarla», aclaró la responsable del Laboratorio de Virus Diarreicos del INTA Castelar (Buenos Aires), Viviana Parreño.
De este modo, los investigadores están a un paso de «llegar a la proteína interna del virus, que constituye el 50 por ciento de su masa, para neutralizarlo».
«Gracias a ciertas características de resistencia podrían en un futuro incorporarse a un bovino transgénico para que «sean expresados en su leche y luego de ser pasteurizada puedan dársela a un bebé para protegerlo, por ejemplo, contra la diarrea por Rotavirus», manifestó Parreño.
En la revista además se difundirá «una entrevista a la investigadora y directora del Centro Científico Tecnológico Conicet Santa Fe, Raquel Chan, que hablará sobre la importancia de la investigación en materia de cultivos mejorados y su impacto en la producción de alimentos de cara al futuro de un aumento poblacional y una mayor demanda de alimentos en el mundo».
RIA «presentará el trabajo que publicaron en la revista Science científicos de 16 países en la cual develaron que la diversidad de especies vegetales tiene un efecto muy importante sobre los procesos que regulan el funcionamiento de las tierras secas».
«Según descubrieron, esa diversidad es crucial para amortiguar los efectos del cambio climático y la desertificación en las regiones más secas del planeta porque son capaces de mantener el carbono, el nitrógeno y el fósforo, a la vez que ayudarían a mantener la fertilidad de los suelos», se aclaró.