Polémica por la utilización de la bandera de la FUBA en la marcha del 24

En las semanas anteriores a la marcha por el 40 aniversario del golpe de estado de 1976 se dieron diferentes discusiones sobre la forma en que debía realizarse la movilización. Una de las más profundas fue la que protagonizaron Patria Grande y el Partido Obrero, que comparten la conducción de la Federación Universitaria de Buenos Aires. Mientras los bolivarianos impulsaron la idea de unificar las marchas, desde la UJS se negaron rotundamente.

No hubo acuerdo y unos marcharon junto a las Madres e HIJOS, mientras que los otros lo hicieron con el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia. Sin embargo, la bandera de la FUBA se hizo presente y desató la polémica.

Al respecto, la UJS-PO emitió un escrito criticando la utilización de la misma, que se reproduce a continuación:

La movilización del 24 de marzo fue precedida por un intenso debate en el movimiento estudiantil de la UBA. En la semana previa, se realizaron reuniones y asambleas en distintas facultades para fijar posición. Fue el caso de Filosofía y Letras, conducida por la izquierda, donde una masiva asamblea de más de 400 compañeros ratificó la posición de la Comisión Directiva de marchar con el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia. En el mismo sentido se pronunciaron las directivas de los centros de la FADU, Farmacia y Bioquímica, Ciencias Veterinarias y Psicología. En esta última facultad, la conducción del centro –El Impulso- se dividió: una parte, la Mella y el Brote, era partidaria de marchar con el kirchnerismo (primero bajo la forma de “hacer una marcha común”, luego de “ir a la dos marchas”); la otra parte, Libres del Sur, de marchar con el Encuentro. La desavenencia anuló al centro en la campaña por el 24, ya que la conducción fue incapaz resolver sus diferencias apelando a mecanismos democráticos. Los compañeros del EPA! (UJS) de Psico se encargaron de poner esta situación de manifiesto curso por curso: era la primera vez que el centro no convocaba a marchar el 24. Finalmente el tema se destrabó el 23 de marzo a la noche, cuando la conducción se avino a llamar a una reunión de Comisión Directiva en la que la posición pro K quedó en minoría.
La FUBA, por su parte, no pudo fijar posición como tal frente al 24. La Mella (Patria Grande), que copreside la Federación, boicoteó tres reuniones de la Junta Representativa, violando todas las resoluciones sobre el método de funcionamiento votado en los últimos congresos. Solo dos centros, Exactas e Ingeniería, se pronunciaron por “ir a las dos marchas”. Para evitar que se expresara esta derrota política, La Mella pasó a boicotear el funcionamiento de la Federación.. ¡que ellos mismos presiden! –ubicándose en el campo de Nuevo Espacio (Franja Morada) y el kirchnerismo-. La asamblea de Filo rechazó esta línea de parálisis e intimó a que se realizara una Junta Representativa de emergencia para definir la posición de la FUBA. Los boicoteadores respondieron, vía mail, que no concurrirían y propusieron, a horas del 24, convocar a una “asamblea inter-facultades” –una aparateada burda para desconocer las representaciones votadas por miles y miles de estudiantes. La impostura era evidente: los que reclamaban la “inter-facultades” no habían realizado asambleas en ninguna de las facultades que dirigen -a diferencia de la izquierda. Frente a esta situación, la presidencia de la FUBA de la UJS y los presidentes de los cinco centros convocantes emitimos una declaración pública informando que nos haríamos cargo de asegurar la presencia de la Federación en la marcha del Encuentro, como habían votado la mayoría de los centros (ver en http://ujotaese.org/?q=node%2F). Más de mil estudiantes concurrieron a esta convocatoria. La Mella, por el contrario, mantuvo silencio de radio y apareció, el mismo 24, con una bandera de la FUBA en una “columna estudiantil” junto a La Cámpora, Aníbal Fernández, Guillermo Moreno y compañía.
Implicancias
Esta política de quebrantar el funcionamiento de la FUBA –con el boicot a la Junta Representativa, la violación de las resoluciones congresales y la usurpación de la bandera el 24 de marzo- es una manifestación de impotencia política. La Mella pretende arrastrar a la Federación a su política de subordinación al kirchnerismo, a pesar del mandato en contrario de la mayoría de los estudiantes. El atropello a los órganos de la FUBA es la consecuencia de una orientación que apunta a quebrar la independencia política de la Federación. La Mella aspira a imponerle a la Federación su propio derrotero, que en último período pasó de los acuerdos con la burocracia de la CTA al voto a Scioli y al armado de una lista común con La Cámpora en el Consejo Superior. Este salto político se produce cuando los K están metidos hasta el cuello en el ajuste en las provincias, municipios, universidades y facultades que dirigen. En la reciente Asamblea Universitaria de Córdoba, La Mella cometió el “crimen de leso movimiento estudiantil” de apoyar al rector kirchnerista Tamarit, el mismo que convalidó los convenios con Monsanto y habilitó a la policía cordobesa a aplicar el represivo Código de Faltas al interior de la UNC. El 24 la Mella saboteó la columna de la FULP, donde también había ganado la marcha independiente por amplia mayoría.
Desafíos
Impulsamos el enérgico repudio a la usurpación y el sabotaje de los órganos de la FUBA. La subordinación al kirchnerismo y a cualquiera de los bloques patronales del ajuste es incompatible con la defensa consecuente de las reivindicaciones de los estudiantes y la educación pública. El desafío es defender la democracia estudiantil, la integridad y la independencia de las organizaciones conquistadas en el último período, que son las condiciones para transformar a estas federaciones en palancas de un masivo movimiento de la juventud que logre derrotar los planes de ajuste de Macri y las autoridades. Convocamos al conjunto de las agrupaciones combativas, independientes y de izquierda a pronunciarse.