Que el Mural No Tape el Bosque

Por UJS-PO

Más allá de la pared

El debate surgido a partir de la realización de un mural kirchnerista en el patio de la Facultad puede llevar a confusiones. Ocurre que la pintada en sí misma no tiene mayor importancia, sino el contenido político en cuestión, que no es otro que la posición del movimiento estudiantil respecto del gobierno y las autoridades. Desde luego, la forma en que se llevó a cabo dicho mural ya nos dice algo. Es que La Cámpora se valió para pintarlo del vaciamiento de la Facultad el último viernes 3/6 tras una amenaza de bomba, contando con el auxilio inestimable de las autoridades kirchneristas. Con el Decano Trinchero a la cabeza, se esforzaron porque el resto de los estudiantes abandonaran rápidamente las instalaciones de Filo y evitar así la actividad de la Comisión de Radio del CEFyL, al tiempo que los jóvenes K proseguían su “obra” en soledad, sin interrupciones críticas. En contraposición con la tradición de los murales de Filo, que siempre representaron las luchas populares contra los atropellos del poder, La Cámpora y Trinchero quieren transformar el patio de Puán -y a la propia Facultad- en una colectora más de la campaña electoral. No se trata de un hecho aislado: recientemente, cedieron el Aula Magna -la 108- para un acto de Tomada, candidato a vicejefe de gobierno de los K que está implicado en la causa judicial por el crimen de nuestro compañero Mariano Ferreyra, pues la jueza Wilma López incluyó en el expediente una escucha telefónica en la que el Ministro de Trabajo dialoga “amistosamente” con José Pedraza respecto de cómo contener el ingreso de los tercerizados al ferrocarril, tres meses después del asesinato. El movimiento estudiantil de Filo rechaza esta política; por eso, el FUP (de La Cámpora y compañía) debieron actuar a sus espaldas.

Quieren copar la Facultad

El problema, por lo tanto, no es el mural en sí, sino el contexto de avanzada por parte de la gestión kirchnerista y las agrupaciones que la representan en el claustro estudiantil. Con patovicas buscan “ordenar” la Facultad, y terminar con el “conflicto social”, como reclama la Presidenta, todo en función de tener menos obstáculos para desarrollar la política educativa del gobierno: acreditar las carreras humanísticas a la CONEAU. Un ataque de esta naturaleza, que implica la desvalorización de nuestros títulos para favorecer el negocio de los posgrados, requiere neutralizar a un movimiento estudiantil independiente y combativo. En función de esto, pretenden un copamiento kirchnerista de la Facultad.

Entre Shocklender y los docentes de Santa Cruz: un mural que los pinta de cuerpo entero

El debate político es, al fin de cuentas, si los estudiantes tenemos que ser furgón de cola del proyecto electoral de la camarilla oficial, o por el contrario defender una posición independiente, única condición a partir de la cual es posible pelear por nuestros reclamos. La pretendida “juventud militante” está armada desde las más altas oficinas del Estado, por parte de funcionarios que cobran decenas de miles de pesos. Cumplen una función de contención; así, no podemos pedir el gas para Medicina -¡que falta hace cuatro (4) años!-, o un nuevo edificio para Filo, porque “afecta al proyecto”. Todo, mientras el país asiste azorado a la consecuencia más brutal y elocuente de la cooptación estatal motorizada por el kirchnerismo: la desnaturalización de las Madres de Plaza de Mayo, y su involucramiento en una corruptela desenfrenada a partir de la obra pública, gracias Shocklender y la complicidad de los funcionarios estatales. En la vereda de enfrente, los docentes de Santa Cruz reclaman por salario en la zona con la canasta familiar más alta del país, mientras el gobierno kirchnerista de la provincia les responde con la Gendarmería, solicitadas a página entera en Clarín y el envío de matones.

La conducción del CEFyL

Siendo este el cuadro, la posición que ha hecho circular La Juntada, actual conducción del CEFyL, no podría ser más desatinada. En vez de intervenir con un posicionamiento propio en esta pelea política, pretenden quedar bien “con Dios y con el diablo”. La lavada de cara a La Cámpora-FUP es sencillamente asombrosa, ya que sostienen que sus prácticas “empiezan a recordarnos” las de Franja Morada. ¿Empiezan? El kirchnerismo no sólo cogobierna la UBA con los radicales; su método es el de la patota. La Cámpora reivindica la reconciliación con la Juventud Sindical, o sea con una organización que inició su trayectoria como rueda de auxilio de la triple A. Los máximos dirigentes de La Cámpora comandaron recientemente el desalojo “ordenado” de los Qom que acampaban en la 9 de Julio, reclamando por sus tierras y por el asesinato de sus compañeros que cometió la policía del kirchnerista Insfrán. El desatino de La Juntada es tal, que nos dicen que los K quieren una juventud “progresista” (aunque “acrítica”, eso sí), el mismo día en que La Cámpora junto a Rudy Ulloa protagonizaron el copamiento violento del sindicato docente en Santa Cruz para reventar su lucha.

Paredón y después

Esta adaptación política de La Juntada al kirchnerismo -y por lo tanto a Trinchero- no es gratuita para el movimiento estudiantil. Sucede que la principal consecuencia es que la conducción del CEFyL ha hecho “la plancha” durante todo el cuatrimestre, lo cual permitió que Trinchero y los K tomaran confianza para impulsar lo suyo.

El jueves pasado la asamblea discutió y votó mayoritariamente por defender la independencia del Centro y la saludable tradición de que los murales representen las luchas populares y no a los representantes de los intereses opuestos a los de estudiantes y docentes. Este miércoles a las 19 horas se va a intervenir el mural, denunciando las políticas de este gobierno y su encubrimiento respecto de las desapariciones de Julio López y Luciano Arruga, además de la connivencia con los responsables del asesinato de Mariano Ferreyra, como Tomada y los burócratas que siguen en la Secretaría de Transporte

Una lucha política

En definitiva hay que hacer despegar al CEFyL de la modorra, cosa posible únicamente recuperando un camino de lucha e independencia política. Es la vía que ya recorremos junto a muchos compañeros en las comisiones que surgieron al calor de la lucha del año pasado -aunque también antes-. La claridad política es fundamental para pelear porque la juventud y sus organizaciones no sean colectoras del gobierno de las mineras, ni de su oposición patronal, sino un factor de lucha junto a los trabajadores.

Unión de Juventudes por el Socialismo
Partido Obrero

Secretaría General CEFyL – Presidencia FUBA