Representantes gremiales y de comunidades escolares porteñas, junto a diputados de la oposición, denunciaron ayer en la Legislatura porteña “una crisis edilicia de escuelas” por el “incumplimiento de las obras de infraestructura que el Ministerio de Educación había prometido el año pasado”.
Del plan de obras anunciado por el ministro de Educación, Esteban Bullrich, «que contemplaba 936, se terminaron a marzo 98, mientras que 424 están en ejecución y las restantes en vías de contratación”, dijo el secretario de UTE-Ctera, Eduardo López, durante una conferencia de prensa en el parlamento.
«Pedimos a Mauricio Macri -jefe de Gobierno de la ciudad de Buenos Aires- que invierta en educación, porque sino empezaremos con las movilizaciones”, manifestó el dirigente.
En igual sentido, el legislador de la CC Sergio Abrevaya exigió al Ejecutivo local “que acelere las obras en escuelas porque en la historia de la ciudad no ha habido un presupuesto tan alto como para no poder arreglar este tema”.
Por su parte, el diputado kirchnerista Francisco “Tito” Nenna denunció el faltante «de 6.500 vacantes en el nivel inicial, falta de docentes en educación media y el retraso de obras que deberían estar terminadas”.
Carlos Oroz, de la asociación docente ADEMYS, consideró que “hay un problema estructural en cuanto a la situación edilicia en la ciudad, sobre todo en la zona sur, que se vincula con el proyecto del macrismo de vaciar la educación pública”.
En la conferencia de prensa también participaron representes de cooperadoras y comunidades educativas, que expusieron algunas de las situaciones edilicias denunciadas.
Pablo Cesaroni, del Normal 7, dijo que el edificio de Humahuaca al 4200, al que concurren cerca de 2.000 alumnos, “no está terminado y tiene serias fallas que deben arreglarse de forma urgente, porque ponen en peligro la seguridad de todos”.
“No hay protección en las ventanas externas ni en las que dan a los patios internos, las bombas de agua nuevas no funcionan, hay problemas eléctricos serios y fallas en la instalación contra incendios, como la falta de mangueras; tampoco están habilitados los ascensores y la calefacción no fue probada”, enumeró.
A su vez, Irma Sosa, de la escuela 21, explicó que “el edificio escolar está en venta por la falta de pago del alquiler de parte del gobierno de la ciudad”.
Fuente: TÉLAM
