En un nuevo capítulo de la pelea de los ex amigos y compañeros de militancia Jorge Ferraresi y Jorge Calzoni el primero, rector de la UNDAV acusa al intendente de Avellaneda de sacarle una sede que debía otorgar a la universidad.
Hasta acá no es más que una típica maldad de una pareja política que se separa, el lugar en cuestión es una propiedad municipal, cedida a la universidad a través de un convenio firmado en tiempos de amistad y que ahora no parece estar siendo entregado.
El tema que nos interesa es que Calzoni decidió escalar en el reclamo y el conflicto y pidió a los rectores del bloque peronista, el cual integra, que voten en el Consejo Interuniversitario Nacional una declaración en apoyo a la UNDAV y en contra del Intendente. Sin embargo, los rectores y las rectoras se resisten a emitir algo público contra Ferraresi y le recuerdan a Calzoni un detalle: el intendente es además el presidente del Instituto Patria y evocan lealtades que superan la buena relación que se pueden formar entre cabezas de universidades nacionales.
Lo que sí logró el rector es que la Mesa Interclaustro de la UNDAV emita un comunicado reclamando por la llamada Sede Riachuelo, aunque por lo bajo ya son varias las voces dentro de la universidad que dicen que Calzoni está en una batalla insólita y no lo quieren acompañar más.
Los párrafos más salientes del escrito expresan lo siguiente:
Como representantes de la mesa interclaustros de la UNDAV, manifestamos nuestro más amplio repudio ante las medidas tomadas por el gobierno municipal de Avellaneda en la apropiación de la Sede Riachuelo, que estaba destinada a ser parte de la Universidad Nacional de Avellaneda para el Departamento de Ambiente y Turismo desde el año 2012.
Se trata del Edificio Beatriz Mendoza que fue otorgado a la UNDAV a partir de un Convenio firmado entre el municipio de Avellaneda, ACUMAR y la Universidad. En el mismo se estableció la construcción de 17 aulas, un laboratorio ambiental, una biblioteca y un laboratorio de ambiente y física.
Hoy más que nunca afirmamos que la Universidad Nacional de Avellaneda es solo del pueblo y para el pueblo. Repudiamos la actitud arbitraria de la Municipalidad de Avellaneda, como siempre lo hemos hecho, ante cualquier medida que atente contra la casa de les estudiantes, les trabajadores, les graduades y la expansión de la planta docente y Nodocente de nuestra Universidad.