El consejo directivo de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad de Buenos Aires eligió en el día de ayer a César Albornoz para que conduzca los destinos de la misma.
La elección se realizó luego de la renuncia de su antecesor José Luis Giusti. Hasta ayer, Albornoz se desempeñaba como secretario de hacienda en la FCE.
Para no perder la costumbre de cada jornada en la que se elige un cargo importante en la UBA, se vivieron momentos de mucha tensión cuando la oposición estudiantil intentó entrar al recinto donde se realizaba la reunión y se cruzaron con la seguridad de la sede.
Finalmente lograron ingresar cuando ya se consumó la votación. Según denunció el consejero estudiantil Guido Lapajufker (Partido Obrero), no lo dejaron ingresar y –por lo tanto- no pudo ser parte del debate ni de la elección. Más tarde el dirigente, surgido de la recordada Lista 86 del Pellegrini, discutió con militantes de Nuevo Espacio que decían haberlo visto sentado durante la elección.
Al respecto, Lapajufker expresó que «es un escándalo, patovicas no me dejaron entrar a la sesión». Y agregó: «la facultad está en manos de una verdadera asociación ilícita, que colocó una patota para cerrar una sesión que, por estatuto, debe ser pública”.
La FUBA acompañó el reclamo opositor. Uno de sus presidentes Adrián Lutvak (La Mella) declaró: “este es otro capítulo de la crisis en la que está sumergida la UBA”.
Y recordó que “hace un mes renunció el vicerrector Darío Richarte, luego de hacerse pública su relación con Jaime Stiusso y ahora sucede esto, que salpica a más funcionarios de la UBA”.
Por su parte, el otro presidente de la FUBA Julián Asiner informó que «el miércoles realizaremos un nuevo corte de calle frente al rectorado para reclamar la investigación de las denuncias contra Giusti, la anulación de la elección trucha de Albornoz, la separación de Richarte de todos sus cargos, la suspensión de Yacobitti, secretario de Hacienda, la apertura de las cuentas de su secretaría, y la conformación de una comisión investigadora independiente para terminar con las cajas negras y asegurar que el presupuesto universitario sea destinado a cubrir las enormes necesidades de la educación pública”.
