Acto por el 30° aniversario del EAAF

El secretario de Derechos Humanos de la Nación, Martín Fresneda, participó del acto conmemorativo por el 30° aniversario del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), que se celebró en la  Biblioteca Nacional, en el que se repasó la trayectoria de la institución, junto a la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto y el antropólogo Raúl Carnese, entre otros.
En la apertura del acto, el presidente del EEAF, Luis Fondebrider, recordó al fundador de la institución. «Nos gustaria rendir homenaje a Clyde Snow que ha sido nuestro mentor”, expresó, y agregó: «Clyde nos enseñó que lo que estábamos estudiando servía para algo. Y el cariño de las Madres, Abuelas y familiares nos contuvo y nos animó a seguir».
«Durante muchos años los gobiernos democráticos fueron pasando; sin embargo fue en 2003 cuando las políticas de Memoria, Verdad y Justicia se hicieron presentes», resaltó Fondebrider.
Por su parte, Fresneda desatacó que «el EAAF son hombres y mujeres que cumplieron con el deber de aportar a nuestra Patria y a todos los que quedamos, buscando la verdad». «Estoy seguro que la historia y la democracia se lo van a agradecer», manifestó el secretario de Derechos Humanos, y agregó: «Quiero reconocer lo buena gente que han sido con las víctimas de tanto odio. Quiero agradecerles como Estado, y como víctima». Para el funcionario, «el trabajo del EAAF ratificó lo que las Madres y Abuelas decían ante los tribunales».
En tanto, Fresneda comunicó a los integrantes del EAAF «el saludo de nuestra Presidenta Cristina Fernandez de Kirchner, quien ha hecho de las luchas pasadas, políticas de Estado en el presente».
Emocionado, el secretario, hijo de militantes desaparecidos, expresó: «Nacimos de esos huesos, porque supimos que tuvimos padres», en relación a los hallazgos  por parte del EAAF de restos de desaparecidos. «Ojalá nunca hubiera existido un EAAF; ojalá nunca hubiéramos pasado tanto horror. Pero todo eso ocurrió, y su trabajo trajo verdad al pueblo argentino y al mundo», finalizó.
Por su parte, Carlotto reconoció que «la labor emprendida por el EAAF está muy ligada a la lucha de las Abuelas, y permite cerrar nuestro duelo». «Recuerdo que Clyde Snow, con un grupo de jóvenes arqueólogos, exhumaron el cuerpo de mi hija. Él fue el que me dijo ‘Estela, tú eres abuela'», relató.
«Es un orgullo el hecho de que estos jóvenes del EAAF sigan dando el ejemplo de un pueblo que no olvida», concluyó la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo.
A su turno, Raúl Carnece, profesor de la cátedra de Antropología de la UBA, recordó que cuando el EAAF comenzó su trabajo «todavía circulaban impunes los responsables del horror de la última dictadura». «Uno de los aportes del EAAF fue introducir técnicas de la antropología biológica y la arqueología para preservar toda evidencia», resaltó.
Aydée Gastelú, de Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, contó que las Madres «siempre nos mantuvimos contacto con el EAAF. Ellos fueron los que me dieron la noticia de que tenían los restos de mi hijo, y con eso reconstruí todo lo que paso con él”. “Para mí eso fue un triunfo de madre, pero también un triunfo de los antropólogos que se dedicaban a eso. Esa noticia fue para mí la luz, la verdad… fue salir de la oscuridad», agregó.
Finalmente, Paula Bombara, a quien el EAAF le restituyó los restos de su padre desaparecido, expresó: «Gracias al EAAF supe que habían encontrado los restos de mi papá. Cuando ellos me dijeron que sí, que efectivamente habían encontrado a mi papá, un nudo en mi garganta se desató. Sentía alegría, como si una parte del cuerpo que había estado dormida por 35 años comenzara a irradiar calor. Solo cuando tuve mis respuestas, el cuerpo de mi padre, y el juicio a sus asesinos, pude empezar a vivir el duelo».