Declaró la hija de un gremialista secuestrado y asesinado en La Perla

Se trata de Adriana Ochoha, hija del gremialista Hugo Estanislao Ochoha, secuestrado y asesinado en 1975, que declaró en el marco del juicio de la megacausa, cuyo principal imputado es el multicondenado represor, Luciano Benjamín Menéndez.
En su testimonio recordó que su padre era delegado gremial el entonces llamado Ministerio de Bienestar Social y afiliado al Sindicato de Empleados Públicos (SEP) de Córdoba liderado en ese entonces por el sindicalista Raúl Ferreyra.
Recordó que en la vivienda estaba ella, que por ese entonces tenía 16 años, junto con su madre y tres hermanos entre 9 y 11 años, mientras que su hermana mayor vivía en frente.
Señaló que cuando su madre les preguntó por qué hacían eso, «la golpearon con fuerza con un arma en la espalda y se llevaron a mi padre supuestamente por averiguación de antecedentes » y añadió que en la sede de la gobernación local «vi a un policía que había participado del secuestro de mi padre».
Precisó que al dirigente gremial lo secuestraron de su domicilio «el mismo día que iba a haber una asamblea en la que iba a denunciar que en el ministerio había armas y combustibles».
Ochoa indicó que en el año 1976, «escuchamos que en el cementerio San Vicente (de la ciudad de Córdoba) había fosas comunes y me acuerdo que en ese lugar, igual que mucha gente íbamos y buscábamos el color de la ropa porque los cuerpos estaban semi enterrados; era horrible ver eso».
«Después -agregó-, nos dijeron que eran cuerpos que como los familiares  no pagaban los nichos en el cementerio los dejaban allí, pero estos eran cuerpos que todavía tenían piel».
Recordó que cuando estaban recorriendo el lugar para tratar de encontrar algún familiar «nadie halaba con nadie, todos llorábamos y buscábamos, sólo había comentarios sobre qué era lo que buscaban, alguna camisa, algún pantalón».
Indicó que finalmente en julio de 2005 «nos  llamaron desde el Equipo Argentino de Antropología Forense, y me avisan que uno de los restos había dado el 95 por ciento de probabilidades que fuera mi padre».
«Encontrarlo fue muy fuerte, estaba desaparecido y fue muy importante saber el por qué estaba desaparecido, fue muy doloroso, pero hoy tenemos donde llevarle una flor». dijo.
Posteriormente el tribunal pasó a un cuarto intermedio hasta mañana a las 9.30, donde está prevista la presencia de cuatro testigos.
TELAM