Randazzo pidió a Macri “sentido común” para evitar el cierre de la línea A de Subtes

El ministro del Interior y Transportes, Florencio Randazzo, calificó de una verdadera locura la decisión del jefe del gobierno porteño, Mauricio Macri, de cerrar durante 60 días esa línea, al advertir que causará fuertes perjuicios tanto a los usuarios como a los comerciantes.
También lo cuestionó porque “ahora también habla de volver a aumentar la tarifa a un valor cercano a los 6 pesos”.
El ministro, en diálogo con el canal C5N, recordó que Mauricio Macri “tardó un año en hacerse cargo del Subte y lo primero que hizo fue aumentar la trifa; ahora habla de cerrar la línea A por sesenta días y de aumentar la tarifa”.
Recordó Randazzo que el Gobierno nacional “en la línea A hizo el cambio total de las vías, la nueva electrificación, el nuevo señalamiento y la puesta en valor de sus estaciones, sin interrumpir un solo día el servicio”, y que además entregó 45 coches nuevos “que el gobierno nacional compró y le entregó al gobierno de la Ciudad”.
Consideró que Macri decidió el cierre temporario del subte, probablemente en la segunda quincena de enero, “sin importarle ni los usuarios ni los comerciantes”.
Comparó esa decisión con lo que está realizando el gobierno nacional en el ferrocarril Sarmiento, donde, dijo, “llevamos adelante un plan muy ambicioso de obras, y trabajamos en horario nocturno: cerramos cuando la gente utiliza menos el servicio; nunca se nos hubiera ocurrido cerrarlo”.
Por otra parte, consideró que “Macri no está dispuesto a poner un sólo centavo del presupuesto del transporte público, cuando para nosotros esa es una política de inclusión, de dar posibilidades a los más humildes de tener una tarifa absolutamente razonable, por lo cual el gobierno nacional subsidia el 70 por ciento del valor de esa tarifa”.
Para Randazzo, el jefe del gobierno de la Ciudad “goza de una enorme impunidad de los multimedios, porque cuando estaba en campaña prometió construir 10 kilómetros de vías nuevas para subtes por año y hace cinco años que está en la función, podría haber multiplicado el trayecto de los subterráneos, pero no hizo un solo kilómetro y nadie dice nada”.
“Está claro –sostuvo el ministro- que a Macri no le importan ni los usuarios ni los comerciantes”.
Concluyó señalando que “apelo al sentido común, a la sensibilidad de Macri, para que revea esta decisión que perjudica a los usuarios y a los comerciantes de la línea A”.