El Gobierno porteño dictó la conciliación obligatoria por el conflicto de los subtes

El subsecretario de Trabajo de la Ciudad de Buenos Aires, Ezequiel Sabor, confirmó que se dictó la conciliación obligatoria en el conflicto gremial que paraliza desde hace seis días los servicios de las seis líneas de subtes.
El funcionario porteño, acompañado por el procurador de la ciudad, Julio Conte Grand, informó que ayer por la noche se cursaron las notificaciones legales a la empresa Metrovías y a los trabajadores en conflicto.
Sabor indicó que la medida fue dictada mediante la resolución 1015/12 firmada anoche, en respuesta a un pedido de la Justicia, mientras que Conte Grand advirtió que la conciliación debe ser acatada «por todas las representaciones gremiales en conflicto» y
que la resolución de la jueza es «prudente» y «atinada», pero aclaró que la intervención de la ciudad «no modifica en absoluto las posturas asumidas en orden a la inexistencia del traspaso» del subterráneo de la Nación a la ciudad, que se acordó el 3 de enero, pero que luego dio marcha atrás por decisión del jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri.
Macri, por su parte, ayer insistió en que su administración “no puede hacerse cargo del subte en estas condiciones”, y reclamó que el Gobierno nacional avale su intención de tomar créditos internacionales para hacer las obras necesarias.
“No puedo decirle a la gente `vamos a agarrar los subtes y que para eso tengo que cerrar jardines de infantes´”, advirtió, y tras repetir su predisposición a hacerse cargo del servicio, propuso que las autoridades nacionales le permitan “ir al BID (Banco Interamericano de Desarrollo), tomar créditos a treinta años para hacer todas estas obras que hacen falta y de ahí arrancamos”.
El jefe comunal agregó que “nosotros no tenemos manera de financiar eso” y consideró que es la administración central la responsable de “decirnos cómo hacerlo antes de hacernos cargo de algo que está quebrado económicamente y técnicamente y que pone en peligro la vida de la gente”.
“Yo no puedo hacerme cargo de una situación en la que no pueda garantizar un servicio seguro”, insistió, y desestimó una vez más los alcances del acuerdo firmado en enero último con el gobierno nacional para la transferencia del Subte porque “solamente tiene el valor de un acta que abrió una instancia de trabajo”.
“En enero, ante el reclamo de que hagamos un esfuerzo, dijimos firmemos un acta que abra un camino de trabajo de 90 días” en los que “debía surgir un contrato con inversiones y un futuro razonable. Pero cuando no advertimos ninguna vocación de negociar, se acabó inmediatamente el tema”, afirmó.
“El paro actual se debe a la doble conducción y a la confrontación entre los denominados metrodelegados y la UTA”, consideró, y señaló que eso ha ido demorando el levantamiento de la medida de fuerza porque “mientras la UTA estuvo razonable, los metrodelegados dijeron que no y ahí estamos; esto es una irregularidad que ha causado la mayor cantidad de paros en la historia del subte”.

Fuente: Télam