El Consejo Superior de la UBA Repudió el Uso de la Violencia para la Solución de Conflictos

En su última sesión del año el Consejo Superior de la Universidad de Buenos Aires, con la presidencia del rector Rubén Hallú, aprobó, en relación con los sucesos acaecidos en el Parque Indoamericano y teniendo en cuenta que «forma parte de la misión de la universidad pública bregar por el mejoramiento de la situación social del país y el afianzamiento del derecho y la justicia», una declaración manifestando “su repudio al uso de la violencia, incluidas la fuerza y las armas, para solucionar conflictos, especialmente conflictos sociales”.

Por ello insta a las partes involucradas, autoridades públicas y particulares, a continuar el diálogo “en pos del logro de una solución conforme a derecho, deponiendo intereses ajenos a la cuestión planteada”, y declara además la necesidad de respetar las normas constitucionales y aquellas con ese rango relativas a los derechos humanos, con los “criterios de universalidad, indivisibilidad e interdependencia de los derechos”.

Hallú, al brindar su informe, dio cuenta de la firma de un convenio con el ministro de Justicia de la Nación, tendiente a la plena normalización del Programa UBA XXII de enseñanza en las cárceles, agregando que el coordinador Leandro Halperín le había informado sobre el levantamiento de la huelga de hambre encarada por algunos reclusos y sobre la devolución de las computadores pertenecientes al Programa por parte del servicio penitenciario. Hallu, entre otras cuestiones, informó además en base a la firme de un convenio, del ofrecimiento de la Corporación Buenos Aires Sur, para levantar en esa zona de la ciudad de Buenos Aires una sede del Ciclo Básico Común, dando cuenta de la publicación de la respectiva licitación que se abriría próximamente.

En la sesión se aprobó el llamado a concursos docentes en la mayoría de las unidades académicas y la ratificación y suscripción de convenios con entidades públicas y privadas del país y del exterior; del otorgamiento del título de profesores eméritos a numerosos docentes de esta casa, así como la designación como Doctor Honoris Causa, a propuesta de la Facultad de Medicina, del científico estadounidense Gabriel N. Hortobagy.

Tuvo dictamen favorable el otorgamiento de fondos para proyectos de investigación, tanto para grupos consolidados como para grupos en formación e investigadores jóvenes, así como otros subsidios, al igual que la creación de la Carrera de Especialización en Administración de Entidades sin Fines de Lucro, en la Facultad de Ciencias Económicas, y la creación de la Maestría Interdisciplinaria en Energía.

Por otros dictámenes se aprobó la apertura de la sede Hospital de Oncología “María Curie” para el dictado de la Carrera de Médico Especialista en Cirugía Oncológica de Cabeza y Cuello; la sede Hospital Alemán para el dictado de la Carrera de Médico Especialista en Cirugía Cardiovascular, y en el Hospital Garrahan la sede para el dictado de Terapia Intensiva pediátrica.

  Al inicio de la sesión, el Consejo Superior rindió homenaje a la profesora Adriana Calvo de Laboirde, recientemente fallecida.