Por En Clave Roja (PTS + independientes)
Luego de un prolongado e intencional silencio, la corriente Julio Antonio Mella se ha pronunciado sobre las elecciones del 28 de junio. Aunque sea recién a escasos cinco días de las elecciones, bienvenido el debate.
Tal vez los simpatizantes de La Mella de alguna facultad deban esforzarse para descifrar en la declaración a quién llama a votar esta agrupación cuando dice “expresión de izquierda y del campo popular.” Pero ya estarán acostumbrados, ya que La Mella ha hecho de la ambigüedad una de sus herramientas políticas preferidas, sobre todo cuando la claridad puede resultar incómoda. Como contribución con estos compañeros/as, desde En Clave ROJA nos ofrecemos gentilmente para dar algunas pistas. A su vez, con los compañeros/as de La Mella, abrimos un fraternal e importante debate acerca de qué debemos construir y cómo hacerlo.
Un acertijo a resolver: descubra a quién le llama La Mella “expresión de izquierda y del campo popular”. Pista: Que el bosque no le tape el Pino
Los compañeros/as de La Mella se lamentan de que “nuestro principal problema, como ya dijimos, es la imposibilidad que hoy tenemos en el campo popular de ubicar una alternativa propia en el escenario electoral.” Es que aún no han encontrado en Argentina un buen militar nacionalista como Chávez a quien votar. Con el ejemplo de Chávez en mente, los compañeros dicen que “esto no significa, de ninguna manera, menospreciar la importancia de la disputa en el terreno electoral, que de hecho ha cobrado gran relevancia en varios procesos latinoamericanos actuales”. Acongojados entonces por la falta de un Chávez, los compañeros de La Mella ofrecen algunas variantes a sus simpatizantes: “votar a cualquiera de las expresiones de izquierda y del campo popular, apoyar iniciativas como el voto propuesta o voto programático como la que impulsa el espacio Otro Camino para Superar la Crisis del cual formamos parte, o votar en blanco o no votar.”
Una parte está muy clara, la posibilidad del voto programático, en blanco o no votar. Pero… ¿a quién se refieren con “expresiones de izquierda y del campo popular”? Acá empieza el acertijo.
Está muy claro a quién no se refieren con esta expresión: “ante las elecciones del 28 desde La Mella planteamos NO votar a ninguna de las alternativas que van a gobernar en nuestra contra, es decir a los K, el PRO, la UCR o la Coalición Cívica.” Algo es algo, aunque no es mucho mérito para quien se dice de izquierda descartar estas variantes. Continuemos entonces para develar el acertijo.
Vayamos al otro extremo. ¿Llamará La Mella a votar a las listas de la izquierda clasista? Aunque ya no vemos la misma audacia para hablar con nombres propios, como sí lo hacen con los K, el PRO, la UCR o la Coalición Cívica, convengamos que algunas frases de la declaración no parecen precisamente una invitación muy tentadora a votar estas opciones. ¿A quién se refieren cuando dicen “no se hace otra cosa que reproducir en lo electoral prácticas sectarias y divisionistas? De nuestra parte, hemos construido un frente clasista unitario entre el PTS, el MAS e Izquierda Socialista. ¿Cuál es la práctica sectaria y divisionista? ¿O será que consideran que la izquierda clasista es sectaria porque debería haber apoyado con su militancia a alguna opción que no sea independiente de los capitalistas? Exploremos esta última opción.
Si seguimos navegando por el mar de definiciones vagas que plantean los compañeros de La Mella, encontramos qué dicen de la centroizquierda. Dice La Mella: “Mucho menos podemos compartir las eternas (y siempre frustradas) expectativas en que ´colgarse´ de alguna figura del progresismo, más o menos mediática y con buena imagen, pueda reemplazar la necesaria organización popular.” Pero ojo aquí. Los “astutos” compañeros de La Mella nos ponen una trampa en el enigma que tratamos de descifrar. Así que nos vemos en la necesidad de dar unas pistas más para el lector y poder llegar a destino: si bien muchos participamos de las pocas y tibias acciones de lucha convocadas por la dirección de la CTA, algunos lo hacemos exigiendo a la dirección de la central que convoque medidas que no sean “testimoniales” (para usar una palabra de moda), mientras otros ponen reticencias a criticar a los dirigentes de la CTA: el segundo es el caso de La Mella, lo cual nos habilita a suponer que para La Mella algunos de los dirigentes de la CTA podrían ser la pata de “organización popular” de alguna candidatura. Como a Heller, apoyado por un sector de la CTA, la Mella no vota… eureka! Nos queda Pino Solanas, apoyado por otro sector de la CTA (y Sabatella en provincia).
Lejos de diferenciarse del “siempre arrepentido” Pino Solanas o de otro de los que no se fue con los gritos del “que se vayan todos del 19 y 20”, Sabatella, y luego de criticar a las organizaciones de izquierda, los compañeros de La Mella dejan la puerta abierta para que el voto a “expresiones de izquierda y del campo popular” termine en un voto a una nueva (y vieja) frustración centroizquierdista. Entonces parecería que el sectarismo que le critican a la izquierda clasista es no apoyar a estas variantes.
Muy bien, descifrado el acertijo, pasemos al debate (nobleza obliga, confesamos que para resolver el acertijo contamos con la inestimable ayuda de muchos compañeros de La Mella que por abajo hacen saber a quien quiera oirlo que van a votar a Pino Solanas.)
¿La centroizquierda es alternativa? ¿Y el nacionalismo burgués?
Son muchos los que se han frustrado una y otra vez en la búsqueda de algún sector progresivo de la burguesía nacional en vez de apostar a la organización independiente de los trabajadores y el pueblo. Uno de los frustrados crónicos es Pino Solanas, que creyó ver un sector así sucesivamente en Frondizi, en el Perón de los ´70 (Triple A incluida), en Menem en el ´89 (sí, sí, Menem!), en Chacho Alvarez o en el Kirchner de los primeros tiempos… y terminó el año pasado apoyando a las patronales del campo. Incluso su compañero de campaña, Claudio Lozano, terminó votando en el Congreso a favor de las patronales del campo junto con el PRO, la Coalición Cívica, la UCR, el peronismo disidente y compañía. Es el problema de confundir a Eduardo Buzzi con Emiliano Zapata y a Alfredo De Angeli con Pancho Villa. No parece ser un buen camino a seguir. ¿Es sectaria la izquierda clasista por no apoyar estas variantes? No compartimos el diagnóstico.
Como dijimos, la última de las “equivocaciones” de Pino fue apoyar a las patronales del campo. Por eso Pino no hace mención alguna de la concentración de tierras en un puñado de terratenientes ni habla de la superexplotación de los peones rurales, como sí lo hacemos desde el Frente de Izquierda que conformamos entre el PTS, el MAS e Izquierda Socialista, frente que en su declaración plantea claramente la expropiación a los terratenientes y la nacionalización del comercio exterior, como algunas de las medidas principales para que la crisis la paguen los capitalistas. ¿Se puede pensar un programa obrero y popular sin afectar la propiedad de los grandes terratenientes? Difícil.
Por otro lado: ¿No es acaso Pino una expresión de esas figuras del progresismo que pretenden reemplazar la organización popular? ¿Alguien vio a Pino movilizándose por la aparición con vida de Luciano Arruga, en la lucha de los trabajadores del subte contra una de las privatizadas que él tanto cuestiona o en las marchas por la educación pública? No. Y tampoco ninguna organización que él haya ayudado a construir. Pino alienta la ilusión de que los grandes cambios vienen desde arriba, suplantando la organización desde debajo de los oprimidos. ¿O alguien piensa que vamos a poder nacionalizar el petróleo y la minería desde la Cámara de Diputados sin la lucha de los trabajadores petroleros y mineros? ¿Puede alguien opinar que la resistencia de los capitalistas a ser expropiados se enfrentará solamente levantando la mano en el Congreso? Un tribuno parlamentario sólo puede darle una voz a esas luchas, no reemplazarlas. Sin embargo, ninguna organización popular construye Pino, ya que su apuesta es a la burguesía nacional y no a la organización independiente de los trabajadores y el pueblo.
Si las cosas se consiguen desde abajo, paradigmático es el caso de Sidor en Venezuela, donde los trabajadores lograron después de una lucha de meses, que incluyó enfrentamientos a la represión, que se expropiara la empresa. Aún así, Chávez le pagó 2.000 millones de dólares a Techint por la compañía (más del valor de mercado). Con ese dinero se podrían haber construido millones de viviendas populares que tanta falta hacen en Venezuela. Ni Pino ni La Mella hablan en su programa de nacionalizar sin indemnización y bajo control obrero: ¿hace falta pagarle millones a los capitalistas en vez de resolver las necesidades obreras y populares?
¿Qué decir de las recientes amenazas de Chávez de restringir la libertad de organización de los trabajadores? ¿Y de la represión a los trabajadores que se organizan, como en Mitsubishi, donde la policía del gobernador chavista dejó dos muertes obreras? ¿Es eso “poder popular”?
Si abrimos este debate es porque creemos que la confianza en variantes patronales, se presenten como nacionalistas o como progres, nos llevará a nuevas derrotas, como sucedió tantas veces en el pasado, y esto, humildemente, es lo que queremos evitar, porque nos proponemos triunfar y tenemos una profunda confianza en la autoorganización de las masas y en la posibilidad y la necesidad de acabar con la explotación y la opresión.
En esa perspectiva, desde el Frente de izquierda y los trabajadores, anticapitalista y socialista nos presentamos en estas elecciones para difundir un programa para que la crisis la paguen los capitalistas: prohibición de los despidos y suspensiones, reparto de las horas de trabajo, expropiación sin indemnización y bajo control obrero de toda empresa que cierre, expropiación de los terratenientes, nacionalización de la banca y del comercio exterior y no al pago de la deuda externa, entre algunas de las medidas fundamentales para que la crisis la paguen los capitalistas y no los trabajadores y el pueblo. Y como no alentamos ningún cambio desde arriba ni de la mano de ningún capitalista, vemos esta intervención electoral solamente como un paso en construir una herramienta política de la clase trabajadora que no apueste a ningún burgués nacional sino que luche por una alternativa de independencia de clase y un gobierno de los trabajadores, en el camino de construir una sociedad sin explotadores ni explotados.
Finalizando, los llamamos a continuar con este importante debate sobre qué construimos y cómo lo hacemos, debate acuciante porque, como ustedes dicen, luego de las elecciones, gane quien gane de los pertenecientes a las distintas variantes patronales, se vendrán golpes más duros para los trabajadores y el pueblo, profundizándose los despidos, las suspensiones y el empeoramiento de la educación publica y la salud. También les proponemos, en lo inmediato, lanzar una campaña en solidaridad con los trabajadores de FP impresoras que han sufrido 28 despidos y siguen peleando por su reincorporación, también en solidaridad con los trabajadores de Tersuave que vienen protagonizando una heroica lucha en el Parque Industrial de San Luis, (la UIA pidió por todos los medios que los repriman) y con los trabajadores docentes, no docentes y estudiantes en lucha de la Universidad de San Pablo. Así como también hacer una gran campaña en defensa del SUTEBA La Plata donde la burocracia de Baradel y la Celeste desconocen la elección que ganaron las compañeras y compañeros docentes de la Lista Rosa-Roja-Marron. Estas son luchas que apoyamos todos los días y les proponemos a los compañeros de La Mella que las tomemos juntos en nuestras manos.
Esto es genial: le inventan una posición a la Mella que jamás tomó (ni tomará) y después la bardean por la posición que le inventaron.
Sos un chiste PTS
mmm… mirá, todo bien, yo voté a El Tren el año pasado en Sociales (y seguramente este año lo vuelva a votar). Peor igual te digo que no me gusta nada que La Mella no se la juegue y diga sí, votamos a Pino. Yo hablé con un montón de pibes de La Mella y todos votan a Pino: cuál es el problema en decirlo??? No me cabe esa onda de no jugársela.
Mirá, yo igual que muchísimos compañeros más no vamos a votar a Pino, porque no consideramos que sea un avance hacia el socialismo. El voto a pino de otros compañeros es coyuntural, por eso tampoco vamos a decir «votamos a..» cuando de acá a unos meses la cosa puede cambiar totalmente.
Yo voy a votar, al igual que muchos otros, al Partido Obrero, porque es un programa que me representa mucho más que el de la centroizquierda, aunque es evidente que acá hay un error impresionante: PTS, el problema de estas elecciones no es el progresismo, es la derecha, logi.
Todo bien, pero por qué no hacen explícito ese debate? El problema principal no es ni con los que voten al PO, ni al frente de izquierda, ni siquiera a los que voten en blanco o impugnen. En ese plano son todas discusiones tácticas. El problema, como dice la respuesta, es que la declaración le deja la puerta abierta a la centroizquierda y pone en un signo de equivalencia entre la izquierda clasista y opciones como Pino. Incluso el FPDS, del cual son muy amigos, en su última prensa de frente pone entrevistas a Pino y a Sabatella como «opciones de la izquierda», casi llamándolos a votar explícitamente, a un pasito nomás… no cabe delimitarse claramente de estas opciones? Son lo mismo que la izquierda clasista? No, hay una gran diferencia
y digamos que sin una fuerza del campo popular terminamos en un frente sectario no?
Mariano, «Mucho menos podemos compartir las eternas (y siempre frustradas) expectativas en que “colgarse” de alguna figura del progresismo, más o menos mediática y con buena imagen, pueda reemplazar la necesaria organización popular. Sobre todo cuando estas experiencias devienen en general en el abandono de toda perspectiva anticapitalista y su reemplazo por un pragmatismo extremo.»
Creo que está bien claro a quién se refiere, y que no llama a votar explícitamente a nadie. De hecho, es una crítica al voto de la Centro izquierda, pero a diferencia tuya, la Mella piensa que el problema no es en estas elecciones delimitar «izquierda» de «izquierda clasista» sino delimitar derecha de izquierda, y, aunque vos pienses que es todo lo mismo, neoliberalismo de progresismo. Pero jamás, como se plantea ahí, se puede confiar en una alternativa que no sea anticapitalista y se construya a partir de la organización popular.
Traten de no leer lo que quieren leer, creo que es más coherente el argumento de «varios de la Mella me dijeron que iban a votar a Pino» que el intento desesperado por encontrar entre líneas adivinando un acertijo (!) un llamado a votar a Proyecto Sur, que no existe.
Si el PTS no puede disputarle en terreno electoral una goma a la centroizquierda y se quiere descargar haciendo pensar que nosotros lo somos, allá ellos. Yo mientras desobedezco a mi dirección (?) y llamo a votar al PO.
O sea, no tengo expectativas en colgarme de la figura de Pino… por eso… voto a Pino!!! Está claro que no llaman a votar a nadie sino que dejan opciones. El problema es que dentro de esas opciones incluyen a Pino, entonces parece que da lo mismo votar a los luchadores que a los que estuvieron con Menem, con Chacho Alvarez y el año pasado votando a favor de la Sociedad Rural. Ya que te preocupa la derecha: cómo se la enfrenta? Votando como Lozano junto con el PRO y la UCR a favor del campo? Me parece poco serio y, además, que va a lleva a una nueva frustación, con los costos que sabemos que eso tiene…
realmente la division centroizquierda-izquierda es simplemente un invento del troskismo para poder encontrar orden en su mundo teleologico,
proyecto sur no se maneja con esos conceptos por que no nos sirve de nada, claramente no somos lo mismo que eso que llaman «los que luchan» por que en primer lugar «no somos sectarios ni excluyentes» como dijo el general, y pretendemos conformar un movimiento nacional y popular, cosa que lo vamos a hacer en la calle, los barrios, las universidades y los sindicatos. Pero para que esa lucha tenga sentido, necesitamos un piso de poder minimo, x eso son muy importante las elecciones para nosotros y por eso la militamos hace 2 meses y llevamos un candidato del 8% al 21% aproximadamente.
Por que no basta con un cineasta gritando en TN, tambien hay que militar el campo popular. y mas del 70% de los votos se definieron gracias a la militancia de base que se puso las botas y se camino toda la ciudad para que sus candidatos lleguen al congreso.
Claramente para mi la Mella no llama a votar por nosotros, y no tiene que por que hacerlo, claramente no se deja llevar por el sectarismo de «los que luchan» que no pueden armar un partido, y tiene 400 sectas diciendo que solamente ellos «son los que luchan», como es el caso del PTS que se la pasa mas tiempo indetificando enemigos que pensando como venserlos. Y claramente coincido que el 29 hayque seguir construyendo y les aseguro que proyecto sur va a seguir construyendo. por que nuestro objetivo no es solamente que el petroleo sea nuestro, si no que el objetivo es crear un movimiento nacional y popular para liberacion nacional.
Por algo estan como estan, y por algo proyecto sur en solo 2 años los borro de toda escena politica a nivel nacional.
y el voto de lozano no hizo nada para impedirlo, si no que mas bien es una chicana, vaciada de contenido la cual se usa para despretigiarnos.
no sea cosa que terminen como los chinos llamando a no votar.
yo invito a al PTS que el 29 le haga caso a la La Mella, y empiece a tratar de tener politicas mas masivas, si no claramente tiene los dias contandos, si n oes que se Fracturan en una P, una T y una S.
Espero que no me preocupe a mí solo la derecha. Pero si preguntás como se enfrenta, la respuesta es con consecuencia. Justamente por un armado político volátil que incluya a un reaccionario como Lozano jamás podría votar yo a Proyecto Sur, pero confío en que Pino Solanas y Alcira Argumedo hagan las denuncias correspondientes en el parlamento. Una fuerza progresista que pueda disputar mediáticamente el avance del neoliberalismo está enfrentando a la derecha, te guste o no. No sé como vas a justificar eso de que «nos da lo mismo», porque están bien diferenciados los partidos de izquierda clasista de la alternativa de Proyecto Sur que es meramente coyuntural y no posee ninguna perspectiva. En todo caso, al que le da todo lo mismo es a vos, que ponés a cualquier figura o espacio que esté por fuera del tradicional partido de vanguardia al lado de las costumbres más nefastas de la política argentina. El PTS es el que debería fijarse como se disputa a la derecha, para algo se presentan a elecciones; nosotros afirmamos que la manera de condenarla es no votar ninguna de sus alternativas, ni siquiera el discurso lavado de Kirchner, y entre esas opciones sí está Pino Solanas porque tiene un programa que critica al gobierno por izquierda y porque tiene cuadros políticos socialistas, como Alcira Argumedo. Que el armado político sea una gelatina y no pueda mantenerse en el tiempo y profundizarse vamos a coincidir, pero a veces hay que salir del programa y ver las realidades específicas para elaborar un plan de acción. Efectivamente, ni Pino Solanas es Chávez, ni Chávez es Fidel, ni Fidel es el Che, pero si no disputás los procesos con las figuras y los movimientos que se van dando en su interior, es muy fácil criticar desde afuera e inventar alternativas que nunca te vas a preguntar por qué «no salen». No reflexionar sobre la propia marginalidad lleva a la muerte cualquier tentativa política acertada que puedan tener las sectas trotskistas.
Y justamente, el PO no es una alternativa de poder, es un voto programático, que se hace pensando que representa realmente una alternativa, pero que no es una disputa de poder. Si las elecciones fueran presidenciales, y las encuestas estuvieran como están, no te preocupes que ya que ustedes no podrían juntarse jamás (en cuánto se separa el FITAS?) el llamado sería por la centro izquierda.
Repito, muy cómoda la posición suya.
fe de erratas: vencerlos.
Un atentado a la razón este comunicado del PTS. Ya están como Jorge Rial: «andan diciendo por los pasillos que votan a PINO». Sólo falta que saquen los videos de un militante de la mella saliendo de un telo con una kirchnerista para demostrar «su vínculo con el gobierno». Una barbaridad lo de estos muchachos.
Se nota la crisis del Borda… mucho loco suelto por la calle.
el pts volvio a ser el partido falopero que alguna vez supo ser
nunca lo dejo de ser…
lo sera por siempre jejeje
LA POLITICA DE LA FACU ES NEFASTA SON TODOS UNA MANGA DE MERCENARIOS HIPOCRITAS, ME DAN ASCO
SIGAN DEFENDIENDO SUS INTERESES MEZQUINOS MIENTRAS NUESTRO PUEBLO SE CAGA DE HAMBRE
VALLAN A LOS BARRIOS PISEN EL BARRO!
COMO EX MILITANTE DE LA FACU LES HABLO DEJENSEN DE JODER SON TODOS UNA MANGA DE FORROS TDOOS! NO SE SALVA NADIE, TA?
BESOOO Y NO PIERDAN EN TIEMPO EN BOLUDECES MILITEN PARA Y CON EL PUEBLO!