Greta Pena será la próxima Subsecretaria de Políticas de Diversidad del Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad, lugar que deja Alba Rueda para tomar el cargo de Enviada especial en orientación sexual e identidad de género en la Cancillería argentina. Con más de 20 años de trabajo en la gestión pública, la abogada, investigadora, periodista y militante lesbiana asume un nuevo desafío en materia de políticas de diversidad y derechos humanos.
Es una referenta histórica del movimiento LGBTI+ argentino, fundadora de la organización 100% Diversidad y Derechos, participó activamente en la lucha por la Ley de Matrimonio Igualitario, la ley de identidad de género, el nuevo Código Civil y Comercial, la Ley de Promoción del Acceso al Empleo Formal para personas Travestis, Transexuales y Transgénero «Diana Sacayán-Lohana Berkins» e impulsó otras conquistas como el aborto legal, seguro y gratuito, y el DNI no binario.
Viene de ejercer el cargo de Subdirectora Ejecutiva de la Agencia Nacional de Discapacidad donde institucionalizó, por primera vez, políticas de género para visibilizar y abordar las múltiples violencias que sufren las mujeres y LGBTI+ con discapacidad y forjó una agenda para garantizar derechos a las personas con discapacidad, más allá de la salud y la rehabilitación.
Fue Directora de Prevención e Investigación de Prácticas Discriminatorias del INADI, Directora Nacional de Enlace con los Ministerios Públicos en el Ministerio de Seguridad, además de haber trabajado en ambas Cámaras del Congreso de la Nación y en el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos. Integra la Dirección de Políticas de Género del Ministerio Público Fiscal de la Nación, donde su última investigación fue “Personas travestis y trans en conflicto con la ley penal”. Integra el Consejo ad honorem del Ministerio de las Mujeres, Géneros y Diversidad.
Se presentó como amicus curiae (amigo de la corte) en la causa por el travesticidio de la activista Diana Sacayan, en el proceso contra Mariana Gómez, la joven violentada por la Policía de la Ciudad al besarse con su esposa en la estación Constitución y participó del amparo colectivo para que las personas trans accedan al derecho a una vivienda digna.
Además, disertó en Costa Rica ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos sobre la “Opinión consultiva sobre identidad de género, e igualdad y no discriminación a parejas del mismo sexo”, ante la Corte Suprema de Justicia en la causa sobre la constitucionalidad de la enseñanza religiosa obligatoria en la provincia de Salta, y en los debates sobre la ley de interrupción voluntaria del embarazo en la Cámara de Diputados de la Nación.
Cordobesa de nacimiento y radicada en la Ciudad de Buenos Aires, tiene 47 años y está casada con Florencia desde 2010, con quien tiene dos hijas de 9 y 4 años.
En este nuevo rol, se propone comenzar una nueva etapa luego del período fundacional de la Subsecretaría y la creación del primer Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad para avanzar en la consolidación de la institucionalidad y trabajar en la aplicación real de las conquistas del movimiento LGBTI+, como el cupo laboral travesti trans, el DNI no binario, las diversidades familiares, la protección de las personas intersex y el acceso a la justicia, entre otros. El eje fundamental será la educación y el combate de los discursos de odio que excluyen y dividen.
Además de las políticas focalizadas, piensa que el avance hacia una sociedad que celebre las diversidades fortalece la democracia e impacta en todos los sectores. Las identidades LGBTI+ se han convertido en un sujeto político con gran potencial para aportar a una Argentina donde cada quien pueda desarrollar en libertad sus biografías de vida.
