Una telaraña con discurso feminista

Por Charo Márquez
@cafeesamor

En los últimas semanas se volvió a hablar de la Flor de la abundancia, una forma de estafa que comenzó, según relevamos, en los años 20 en Estado Unidos. Pero la novedad es que esta vez, están usando discursos feministas para atraer inversoras.

Vamos por partes: un Telar de la abundancia es una estafa piramidal, como la que hizo Madoff en Estados Unidos y estalló en 2008, como antes había hecho Carlos Ponzi en los años 20 también en el gran país del norte y como desde hace años se viene viendo en nuestra región. Ya en 2016, la Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos de Argentina advirtió del peligro que esto significaba para la sociedad.

Lo llamativo es que en esta nueva oleada de estafas, se buscan mujeres con discursos feministas para que inviertan ganen más dinero sin hacer nada más que conseguir a otras participantes.

El monto para entrar puede ser desde $1000 hasta u$s 2000 dependiendo del círculo y se promete ganar unas siete u ocho veces más el valor original. Lo cual, en este contexto, es tentador. Especialmente para las mujeres, lesbianas, travestis y trans, cuyas economías son las primeras en verse afectadas en contextos de crisis y cuyos cuerpos son los que terminan pagando los platos rotos de las malas administraciones tanto a nivel nacional como doméstico. In this economy, la promesa de hacerse de unos pesos extra es tentadora. Quién no querría poner mil y llevarse ocho mil en unos días con la sola contraprestación de conseguir que sus amigas se sumen. Sobre todo, tomando en cuenta la necesidad de autonomía que las feminidades tienen en general: recordemos que al poder acceder de forma masiva a la moratoria previsional, las mujeres se divorciaron en masa ya que habían podido solucionar una de las principales fuentes de sometimiento de parte de sus parejas, la guita.

No es la primera vez que se usa el discurso feminista para convencer a un grupo de mujeres de que hagan cosas que van en detrimento suyo. Sin embargo, es llamativo que se apele a frases como “el empoderamiento de las mujeres” o “ganamos todas” para convocar a otras a que se sumen a una estafa. Es llamativo en tanto que constituye una contradicción en sus propios términos: la sororidad y el affidamento implican un trabajo colectivo en pos de una salida también colectiva a un problema que se presumía individual. Es justamente lo contrario a que una X convoque a una Y para que Z se quede con su dinero y así volver a empezar.

¿A qué mente retorcida se le habrá ocurrido usar un discurso político aperturista para conseguir víctimas de una actividad delictiva organizada y multitudinaria? Por otro lado, también es destacable que se haya delimitado al público femenino como target preferencial, es como si nos estuvieran analizando pormenorizadamente y siguiendo nuestras trayectorias políticas para estafarnos.

Si recibís invitaciones a participar de este tipo de emprendimientos, acercate a la Fiscalía más cercana a denunciar.