A tres años de la desaparición de Rivera Alegre, su madre sigue responsabilizando a la Policía cordobesa

Vivian Alegre, madre del joven desapareció tras haber asistido a un recital de un grupo bailantero en la capital provincial, aseguró que espera que el juicio oral que se celebrará en mayo ponga al descubierto cómo operan el aparato político y policial en Córdoba.
«El juicio comenzará el 18 de mayo. Espero el inicio con la expectativa de que se sepa la verdad, no lo que quiere cerrar la Justicia provincial. Sigo sin creer que sólo estas tres personas (imputadas) tuvieron algo que ver. Detrás de esto hay gente al amparo político y policial», aseguró a la prensa la mujer.
Alegre, que durante el mediodía encabezó un acto en las inmediaciones del Palacio de Justicia II, sede del fuero penal de la capital cordobesa, se mostró confiada en que, durante el juicio, «salga a la luz la verdad, porque los grupos narcos no actúan solos».
La mujer enfatizó que, por lo que le pasó a su hijo, «debe responder, por acción o por omisión, la Policía cordobesa, en primer lugar, y luego la Justicia, por no haber controlado a dicha fuerza».
Rivera Alegre desapareció el 19 de febrero de 2012 a la salida de un baile en el Estadio del Centro y la causa, elevado a juicio oral a fines del año pasado, será sustanciada ante la Cámara 11 del Crimen de la ciudad de Córdoba.
Para recordar a Rivera Alegre, que era apodado como «El Rubio del pasaje», esta tarde fue realizado un mural, en las calles Mariano Moreno y Caseros, de la capital cordobesa, y seguidamente estaba preparado un festival en la plaza Vélez Sársfield.
Varias veces, Viviana Alegre se quejó: «no hay ningún policía imputado. Ni la custodia de la banda (a la que había ido a ver su hijo), ni un comisario que todos sabemos que controla esa zona, ni los policías involucrados en el negocio (en alusión a la droga)».
Rivera Alegre desapareció en febrero de 2012 a la salida de un baile en el Estadio del Centro cuando, según conjeturan los investigadores, fue a comprar droga para alguien del espectáculo y lo habrían asesinado de un balazo por haber pagado la droga con un billete falso de 100 pesos.
Los hechos habrían ocurrido en una casa de barrio Maldonado, en el este de la capital cordobesa, donde reside María del Carmen «La Colela» Rearte, sindicada como vinculada con el narcotráfico, según los investigadores.
Dos hijos de la mujer serían los autores materiales del crimen y el tercer detenido fue identificado como Aldo Monje, quien trabajaba en el Cementerio San Vicente, donde habría cremado el cuerpo de Rivera Alegre después de mantenerlo enterrado algunos meses en una zona de barrancas.
En el juicio será determinada la situación penal de Monje y de Pablo Rearte (29), mientras que otro hermano de este último, de 17 años, por tratarse de un menor cuando sucedieron los hechos, fue sometido a las disposiciones que rigen a los jóvenes en conflicto con la ley penal.
TELAM