La FUBA exigió justicia por Ismael Sosa

Tras conocerse la noticia de la muerte de Ismael Sosa, el joven que fue visto por última vez cuando fue detenido por la policía cordobesa en la previa de un recital de La Renga, la Federación Universitaria de Buenos Aires (FUBA) se sumó al reclamo de gran parte de la juventud argentina.
Desde las dos presidencias con las que cuenta la FUBA se expresaron al respecto.
Adrián Lutvak (La Mella) declaró que “como Walter Bulacio, como Rubén Carballo una vez más un joven que va a un recital de rock termina muerto y la policía aparece como responsable».
Lutvak agregó: “al igual que los familiares estamos exigiendo justicia, una investigación independiente y que no termine impune este caso como el de tantos otros pibes que murieron en democracia en manos de la maldita policía».
Por su parte, Julián Asiner (Partido Obrero) denunció que “la muerte de Ismael es el resultado de la impunidad policial y de una política, llamada de seguridad, que se centra en la persecución, criminalización y represión de la juventud”.
Asiner afirmó que “Ismael se suma a la larga lista de víctimas del gatillo fácil, junto a Walter Bulacio, Rubén Carballo y Luciano Arruga, todos crímenes donde el denominador común es la impunidad y el silencio de los sucesivos gobiernos que sólo pretenden deslindar sus responsabilidades”.
Para él «es claro que el crimen de Ismael Sosa es el resultado de una línea de persecución contra la juventud, que es política de Estado en Córdoba, la provincia del general Milani, donde el Código de Faltas avala las detenciones por ‘portación de cara’”.
“Cuando nuestro país está sacudido por una crisis con los servicios de inteligencia –finalizó Asiner-, oficialistas y opositores se esmeran por sostener y encubrir a estos aparatos represivos, cuyos orígenes y prácticas se remontan a la última dictadura militar”.