El gobierno nacional y los cinco sindicatos docentes con representación en todo el país no llegaron a un acuerdo, por lo que el Ministerio de Trabajo dictó la conciliación obligatoria para continuar las negociaciones y garantizar el inicio de las clases.
El jefe de Gabinete Jorge Capitanich, en conferencia de prensa, al término de la tercera reunión paritaria celebrada ayer en el Ministerio de Educación, lamentó no haber llegado a un acuerdo, a pesar del «esfuerzo en materia de inversión educativa» realizado por el Estado nacional y la «voluntad de diálogo» manifestada por ambas partes.
Por su parte, las cinco entidades gremiales ratificaron las medidas de fuerza anunciadas la semana pasada, pero mientras la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera) adelantó que “es un hecho” el paro previsto para hoy y mañana, los otros cuatro gremios agrupados en la CGT anunciaron que en principio acatarían la conciliación obligatoria próxima a dictarse.
Ctera había dispuesto un paro de 48 horas para miércoles y jueves y los restantes gremios -la Unión de Docentes Argentinos (UDA), la Asociación del Magisterio de la Enseñanza Técnica (Amet), el Sindicato Argentino de Docentes Particulares (SADOP) y la Confederación de Educadores Argentinos (CEA)- habían resuelto un paro por 72.
En este marco, la titular de la Ctera, Stella Maldinado, calificó como «absolutamente insuficiente» la propuesta salarial realizada por el Gobierno en la paritaria nacional, y afirmó que el gremio «rechazará por improcedente» la conciliación obligatoria.
La dirigente ratificó de esta manera el paro anunciado a nivel nacional, y dijo que «la devaluación y los incrementos en los precios» impactaron sobre los salarios del sector. Maldonado volvió a rechazar el concepto de presentismo propuesto por el gobierno nacional, aunque dijo que los gremios «siempre estamos abiertos al diálogo».
En tanto, en el ámbito porteño, el ministro de Educación de la Ciudad, Esteban Bullrich, aseguró que «se les va a descontar los días de paro» a los docentes que se sumen a la medida de fuerza, en rechazo además a la instalación de las aulas modulares y para reclamar por los miles de niños que no consiguieron vacantes para la escuela publica.
El funcionario señaló que «estamos muy sorprendidos porque hemos hecho un esfuerzo con la plata de todos los porteños para dar un muy buen aumento, inclusive por encima de otras provincias que no tienen paro, y nos parece que no es el camino». Asimismo, consideró que los docentes «están tomando una medida que es absolutamente política» y que «le quieren hacer el paro a Macri y nada más».
Con respecto al reclamo de la comunidad educativa porteña por la falta de vacantes para comenzar el ciclo lectivo 2014 en escuelas públicas de la CABA, el funcionario aseguró que «de 4 (años) para arriba todos tienen vacante» y que «nuestro objetivo es que el año que viene todos los de 3» las tengan.
Bullrich precisó que no se puede pedir «una conciliación obligatoria» para evitar el paro que postergará el comienzo de clases dos días ya que esta medida se puede pedir «cuando hay una demanda laboral». Y añadió: «Acá no están pidiendo más salario, cerramos en un muy buen aumento. Están pidiendo por el tema de las vacantes y por las aulas modulares, que ellos llaman container, por eso es difícil una conciliación porque en realidad lo que dicen es que no están de acuerdo con una política».
«Si ese es el problema por el que están dejando a cientos de miles de niños y niñas sin clases me parece que no es el camino, porque la verdad no está bien la educación como para estar usándola como una herramienta de presión política», agregó.
Desde la Secretaría Gremial de Ademys, a cargo de Carlos Oroz, se informó que la asociación docente rechaza la propuesta del ministro de Bullrich porque no cubre la pérdida del salario producto de la erosión inflacionaria. “Desde Ademys ratificamos el paro que se llevará a cabo los días 5 y 6 de marzo, con movilización a la Jefatura de Gobierno. El aumento en cuotas, con término en septiembre, es una burla en el contexto de este proceso inflacionario”, sostuvo.
