Blanca Santucho Será Reconocida como Personalidad Destacada de los Derechos Humanos

Hoy a las 18 se celebrará el acto de entrega del «Diploma de Personalidad Destacada en el Ámbito de los Derechos Humanos» de la Ciudad de Buenos Aires a Blanca Santucho, en el Salón Montevideo de la Legislatura porteña (Perú 160, planta baja). Participarán del acto, además de la homenajeada, la legisladora Diana Maffía -autora del proyecto- y la diputada nacional Fernanda Gil Lozano, ambas de la Coalición Cívica. También se espera la presencia de la senadora nacional por Córdoba Norma Morandini, del Frente Cívico.

Blanca Rina Santucho nació en Santiago del Estero, hija del matrimonio entre Francisco Santucho y Elmina Juárez, y hermana de Amílcar Latino, Raúl Alberto, Carlos Híber, Francisco René, Omar Rubén y Oscar Asdrúbal; y de Mario Roberto, Manuela Elmina y Julio César, fruto del segundo matrimonio de su padre con Manuela del Carmen Juárez.

En 1970 comenzó una persecución policial a la familia Santucho que se tornaría sistemática, debido a la intensa militancia política de algunos de sus integrantes, que tuvo en Mario Roberto, fundador y secretario general del Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) y comandante del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP), su mayor exponente. La saga de violencia ejercida por el terrorismo de Estado se inició en agosto de 1972, cuando la primera mujer de Mario Roberto, Ana María Villarreal, fue asesinada en la tristemente célebre «Masacre de Trelew», y continuó con los asesinatos y desapariciones de Francisco René, Mario Roberto, hermanos de Blanca, y su sobrina María del Valle; los asesinatos de sus hermanos Oscar Asdrúbal y Carlos Híber; y las desapariciones de su hermana Manuela Elmina, su sobrina Mercedes Elmina y sus cuñadas Cristina Navajas y Liliana Delfino, sumado a la detención a disposición del PEN de otros/as integrantes de la familia.

Luego del golpe militar, Blanca se exilió junto a sus padres y organizó una campaña de denuncia de los crímenes cometidos por la dictadura en la Argentina, y en particular con su familia. Desde Cuba viajaron a Estados Unidos, donde sus padres dieron una conferencia de prensa en la sede de las Naciones Unidas en Nueva York. En diciembre de 1976, Blanca y sus padres viajaron a Europa, donde intensificaron la campaña solidaria con los presos políticos y recibieron el apoyo de distintos partidos, medios de comunicación, de personalidades de la cultura de Francia e Italia y del Papa Paulo VI.

Blanca Santucho regresó definitivamente a la Argentina antes de las elecciones del 30 de octubre de 1983. Allí tomó contacto con organismos de derechos humanos como el Cels, Familiares de Desaparecidos y la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos; y más tarde, con la Conadep. Tal vez la materialización de este calvario familiar traducido en lucha y testimonio es el libro «Nosotros, los Santucho», escrito por Blanca y publicado en 1997.

Desde hace cuatro años reside en la Ciudad de Buenos Aires, tiempo durante el cual se dedicó exclusiva y denodadamente a la búsqueda de los restos de su hermano Mario Roberto, los cuales se encontrarían, según coinciden varios testimonios, dentro de los límites del cuartel militar de Campo de Mayo. Esta misma casa se pronunció a favor de declarar el apoyo en la búsqueda de los restos de su hermano para darle cristiana sepultura.