El ministro de Justicia y Seguridad porteño, Guillermo Montenegro, afirmó que por ahora el «jefe político» de la Policía Metropolitana es él y que la idea es que la fuerza se ponga en marcha en octubre con efectivos que colaborarán en investigaciones con los fiscales.
Montenegro formuló declaraciones luego de firmar un convenio entre el Instituto Superior de Seguridad Pública -organismo encargado de formar a los nuevos policías- y el Instituto Interamericano de Derechos Humanos (IIDH).
«Por ahora, el jefe político de la Policía soy yo», dijo el ministro al ser consultado sobre quién ocupará el puesto que quedó vacante tras la renuncia del ex jefe de la fuerza, Jorge «Fino» Palacios.
Montenegro aclaró que en la parte operativa queda al frente de la Policía quien secundaba a Palacios, Osvaldo Horacio Chamorro, y que en abril del año próximo se podría nombrar a un nuevo jefe.
El funcionario explicó que el 31 de octubre 850 efectivos con experiencia en otras fuerzas de seguridad terminarán con la capacitación que comenzaron hace cinco meses, y comenzarán a trabajar 250 de ellos en investigaciones.
«Lo primero que harán es trabajar con las fiscalías en las investigaciones de los delitos de la órbita de la Ciudad, como la venta ambulante y las usurpaciones. Después también se sumarán a Tránsito», indicó el funcionario.
La idea es que la nueva fuerza porteña se encargue de tareas actualmente realizadas por la Policía Federal. Mientras tanto, la fuerza está llamando a licitación para la compra de armas y patrulleros y aguarda la reglamentación, por decreto, de la ley sancionada en noviembre por la cual se creó la Policía Metropolitana.
Si bien algunos efectivos trabajarán en las fiscalías, otros tendrán base en el Ministerio de Seguridad hasta que se sancione la ley que dividirá a la ciudad en 15 comunas y cada una cuente con su propia seccional.
Durante la firma del convenio con el IIDH, Montenegro sostuvo que para los nuevos policías «un tema prioritario y vital son los derechos humanos» y recordó que «varias fuerzas de nuestro país y de Latinoamérica están cuestionadas» en ese sentido.
«Hay que tener claras las garantías de los ciudadanos y les pido que se las transmitan a sus colegas», dijo el ministro a unos 40 aspirantes que estuvieron presentes en el acto.
Por eso, los futuros policías asistirán a talleres, conferencias y seminarios para fortalecer las políticas públicas en materia de derechos humanos en el marco de su preparación.
Por su parte, el director ejecutivo del IIDH, Roberto Cuellar Martínez, destacó que «el derecho a la seguridad es un derecho humano fundamental» y que en los últimos años se firmaron convenios similares con Chile, Brasil y varios países centroamericanos.
«La transición es compleja porque la Policía está acostumbrada a reprimir en circunstancias anómalas (en referencia a las dictaduras militares), pero ahora tienen que lidiar con la criminalidad de otra manera», agregó.
Luego recibió de parte de Montenegro los manuales de estudio que utilizan los aspirantes a policías, con los cuales aprenden Derecho Procesal Penal, Contravencional y de Faltas, y en breve sumarán Constitucional, Administrativo y sobre el Régimen de Menores.
Fuente: TELAM
