Acusaciones cruzadas luego del Congreso de la FUBA

fuba 17 1

Continúan las repercusiones luego del Congreso de la Federación Universitaria de Buenos Aires. Tras la Asamblea en la que las agrupaciones opositoras reclamaron que se ponga la fecha de elección de autoridades, los distintos espacios emitieron comunicados en los que se acusan mutuamente por la falta de comicios en la federación.

A continuación, reproducimos en su totalidad las palabras del Espacio Reformista y del Partido Obrero:

Espacio Reformista

Desde hace unas semanas, los estudiantes de la Universidad de Buenos Aires nos vimos sorprendidos por otra maniobra fraudulenta por parte de las agrupaciones que usurpan la conducción de la FUBA (La Mella y la UJS-Partido Obrero): convocaron para un supuesto Congreso para el 19, 20 y 21 de abril. Las agrupaciones que usurpan el máximo órgano gremial estudiantil de la UBA realizaron una parodia de Congreso a espaldas de los estudiantes, al cual asistieron exclusivamente sus militantes, y donde el eje de debate fue el modo en que se reparten los millones de pesos provenientes del negocio de las fotocopias con el objetivo de financiar sus partidos políticos.
Ante la presión y necesidad de decir algo sobre porque no llaman a elecciones,, el Partido Obrero respondió, sin ningún tipo de vergüenza, que no llaman a Congreso debido a la posibilidad de que el Reformismo (mayoría del claustro estudiantil en el Consejo Superior) gane y se haga con la conducción de la Federación.
Desde el Espacio Reformista, vamos a seguir exigiendo el cumplimiento de los estatutos (de tal manera que haya un único presidente elegido en elecciones democráticas) y que se presenten los balances que rindan cuentas de los millones de pesos que manejan de manera discrecional. Le exigimos a la conducción de la FUBA que llame a un Congreso en serio y convocamos a todo el arco político estudiantil de la Universidad a que acompañe nuestras demandas por una FUBA democrática, trasparente y representativa.
Como mayoría estudiantil de la UBA vamos a hacer todos los esfuerzos para hacer realidad una FUBA de los estudiantes.

UJS-Partido Obrero

El viernes pasado culminó el Congreso Extraordinario de la Federación Universitaria de Buenos Aires con una asamblea de más de 1000 estudiantes frente al Ministerio de Educación y una marcha de antorchas que llegó hasta el Obelisco, luego de pasar por la carpa docente de CTERA y expresar nuestra solidaridad por la represión sufrida a manos de la policía. Durante tres días, centenares de estudiantes pasaron por las asambleas, comisiones y paneles de debate que la FUBA montó en las diferentes facultades y sedes del CBC. Se debatió el conflicto docente a la luz de la situación política nacional, los ataques represivos ocurridos en Jujuy y Comahue y la necesidad de organizar un plan de lucha para que los estudiantes intervengamos en defensa de la educación, de los trabajadores y de nuestras propias reivindicaciones. El método del congreso abierto contrastó con la parálisis de la federación nacional, en manos de Franja Morada e integrada al gobierno, que renunció a su responsabilidad de organizar a los estudiantes. Dejamos aquí las principales resoluciones y conclusiones políticas.
Un régimen anti-educativo
En el debate la UJS puso de manifiesto que el actual conflicto docente reveló la existencia en nuestro país de un régimen político anti-educativo. Convocados por Vidal en el Hotel Savoy, todos los gobernadores cerraron filas detrás del techo del 18% en las paritarias; el piso fue el 3% que Alicia Kirchner quiere imponer a los palos y balas de goma en Santa Cruz. Denunciamos que el macrismo justifica los ataques a los docentes en nombre de una provincialización de la educación, que fue sancionada por Menem y Videla y perpetuada por los gobiernos kirchneristas. En esa misma sintonía actúan los rectores: el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), que traspasó el mando de un rector radical a uno peronista (Tecchi de Jujuy, reivindicado por La Cámpora), no dijo una sola palabra del reclamo docente que sacude a las universidades. Con menos prensa que en el caso de media e inicial, la lucha de los docentes universitarios lleva 16 jornadas de paro impulsadas por Conadu Histórica (la Conadu K aún no convocó paros por la paritaria universitaria).
Quienes en el Congreso de la FUBA señalaron como enemigo excluyente a Macri, omitieron decir que desde los radicales de Franja Morada a los kirchneristas del conurbano, 63 rectores de universidades nacionales acordaron con el gobierno un nuevo ciclo de contra-reformas. El desplante a los docentes, a quienes los rectores también les niegan la aplicación del convenio colectivo, tiene por detrás este gigantesco negocio universitario. El Sistema de Reconocimiento Académico, la Coneau macrista, es la nueva hoja de ruta para devaluar títulos y acortar carreras, igualarlas a las privadas y desplazar contenidos específicos a posgrados arancelados. La privatización es la línea maestra del rector Barbieri de la UBA, ex candidato a ministro de Educación de Scioli, que selló nuevos convenios con el Banco Santander. Afianzado en los pactos con multinacionales, Barbieri buscará este año su reelección. Su alter ego en el Ministerio de Ciencia, Lino Barañao, acaba de desconocer el acta firmada por él mismo en diciembre, que aseguraba el ingreso de 500 investigadores al sistema científico.
Qué lucha y qué dirección
A partir de esta caracterización, la UJS defendió en el congreso la necesidad de la unidad de estudiantes y docentes en un plan de lucha que golpee al gobierno y a todo el régimen anti-educativo, sus gobernadores, rectores y decanos. A propuesta nuestra, se votó la organización de una semana nacional de protesta, del 8 al 12 de mayo, con clases públicas, ocupaciones de facultades y cortes. Ante la defección de la FUA morada, resolvimos impulsar una marcha nacional a Plaza de Mayo, en una fecha a coordinar con los sindicatos docentes. Al mismo tiempo, el miércoles 10 realizaremos una acción particular frente al Consejo Superior, por todos los reclamos de la UBA. También se resolvió la organización de una semana por los derechos de las mujeres, previa al 3 de junio, exigiendo el presupuesto necesario para que los “protocolos” ante casos de violencia de género no sean letra muerta, es decir, que existan centros de atención y prevención de esta problemática en la universidad. No partimos de cero: los estudiantes estuvimos presentes en cada una de las grandes marchas de marzo y ocupamos facultades y colegios para rechazar la represión. En la asamblea general, la UJS defendió esta orientación con más de 300 compañeros, constituyéndose como agrupación en la primera minoría de la misma.
En dirección opuesta intervino el bloque Cámpora-Mella-Nuevo Encuentro, que centró su campaña en provocaciones contra la izquierda y en el reclamo de un nuevo congreso para incorporar al kirchnerismo a la conducción de la FUBA. La idea de ir de congreso en congreso refleja la renuncia de este sector a organizar un plan de lucha en serio contra Macri. La campaña provocadora #PonéLaFecha, refiriéndose a la FUBA como una “burocracia estudiantil”, no apuntaba a concretar una acción de lucha, una marcha o una ocupación, sino a un copamiento K de la federación que ponga fin a su carácter independiente. Lejos de “unir” en la lucha contra Macri, la política de este bloque fue dividir. De nuestra parte, señalamos que quienes ajustan y reprimen docentes en Santa Cruz no van a defender a los estudiantes y docentes en la UBA. Denunciamos que la repentina preocupación de La Cámpora por la institucionalidad de la FUBA es pura hipocresía: boicotearon los congresos de 2012, 2014 y 2015 junto a Franja Morada; y en 2016 estuvieron a punto entregarles la federación a cargo de nuevos cargos en el rectorado de Barbieri (ya tienen varios). La Mella quedó completamente desdibujada detrás de esta orientación, al punto que cambió el color de sus banderas, de verde a celeste…
Manos a la obra
El Congreso de la FUBA dejó grandes resoluciones de lucha, que la UJS se esforzará por poner en práctica en los próximos días. Tanto en la UBA como en el interior del país, de Jujuy a Santa Cruz preparamos la intervención activa del movimiento estudiantil junto a los trabajadores, contra los gobiernos del ajuste y la represión. La pelea por la dirección del movimiento estudiantil opone hoy a tres bloques: Franja Morada, el kirchnerismo y sus aliados, y la izquierda encabezada por la UJS. La resolución de esta confrontación en la FUBA no se resolverá con acuerdos de cúpulas: es necesario que los estudiantes intervengan masivamente y tomen la cuestión en sus manos. El Congreso Extraordinario permitió involucrar a miles de compañeros en el destino de la lucha educativa y de la orientación de su propia federación. Tenemos, ahora, un plan de acción que recorrer para seguir fortaleciendo una dirección independiente y de lucha para la juventud.