En su última reunión, el Consejo Superior de la UBA aprobó un proyecto que solicita a la Inspección General de Justicia que supervise la elección de la Federación Universitaria de Buenos Aires. La misma está pautada para el próximo martes. Esto no cayó nada bien en la conducción de la federación, que rechazó de plano la idea.
Uno de sus presidentes, Julián Asiner (Partido Obrero), declaró que «rechazamos la intromisión de las autoridades universitarias y del Estado, a través de la IGJ, en la organización de los estudiantes. Este intento de virtual intervención de la FUBA no es casual: la Federación molesta porque ha estado al frente de las grandes movilizaciones protagonizadas por docentes y estudiantes contra la política de ajuste que el gobierno de Macri está aplicando en la universidad pública».
Asiner denunció que «la IGJ es una sucursal de los servicios y la corrupta Franja Morada. Macri colocó al frente del organismo a Sergio Brodsky, ex secretario académico de la Facultad de Derecho por Franja Morada, que responde directamente al clan de Angelici y Richarte que en estos momentos disputa el control del negocio del fútbol argentino».
El titular de la federación estudiantil destacó que «La lucha y las denuncias de la FUBA obligaron en el pasado a la separación de Darío Richarte, el ‘señor ocho’, ex subjefe de la Side vinculado a Jaime Stiuso, del cargo de vicerrector de la UBA donde lo había colocado Barbieri con el aval del Consejo Superior. Ahora Brodsky y Richarte quieren volver a la universidad con el único objetivo de intervenir la FUBA y aplacar la movilización estudiantil contra el ajuste del gobierno».
Asiner finalizó informando que «en la tarde de hoy se reunirá la Junta Representativa de la FUBA, que representa a los trece centros de estudiantes de la UBA. Rechazaremos la injerencia de los decanos, el Rectorado y los agentes del macrismo en la FUBA y convocaremos a todo el movimiento estudiantil a intervenir para defender la integridad y la independencia de la Federación. La defensa de la FUBA es crucial para derrotar el ajuste contra la universidad. Lo saben los estudiantes, y también lo sabe el gobierno».
Su par en la presidencia, Adrián Lutvak (La Mella) expresó: “que el Rectorado se pronuncie por intervenir las elecciones de un gremio democrático es realmente grave y preocupante. Y no sólo eso, sino que el titular a cargo de la Inspección General de Justicia (IGJ) es Sergio Brodsky, un abogado que fue funcionario de la UBA, está ligado a la Franja Morada y es la mano derecha de Angelici y Richarte. Con solo ver el prontuario del interventor que buscaría “normalizar” la FUBA no quedan dudas del objetivo de la maniobra: callar una federación que lucha en defensa de la educación pública y se opone al recorte presupuestario del Gobierno de Macri. Desde la presidencia de la FUBA no vamos a permitir que el Gobierno Nacional, de la mano de Nuevo Espacio – Franja Morada y la peor de las mafias del fútbol y el poder judicial, intervenga la federación de lucha que construimos día a día porque no la pueden ganar”.
Las actividades del congreso comenzaron ayer y continúan hoy con distintos debates que se desarrollan en las diferentes facultades de la UBA.