Roitbarg se despidió del Pelle

A través de una carta abierta a la comunidad del colegio, el ahora ex Rector del Carlos Pellegrini le dijo adiós al tradicional colegio de la UBA.

Marcelo Roitbarg le deja así su lugar a Leandro Rodríguez, otrora vicerrector en el Pelle.

A continuación, reproducimos la carta completa:

Buenos Aires, 28 de febrero de 2015
Hoy es mi último día como Rector de esta prestigiosa escuela, que tuve el gran orgullo de conducir.
No sé si en los primeros tiempos extrañaré mucho mi labor, lo que si sé es que me faltarán algunos de los muchos afectos que aquí dejo.
Mi gestión fue de transición, porque cuando asumí, en medio de un grave conflicto que se había extendido por meses, el gran reclamo era la normalidad. Y eso es lo que hubo en este tiempo: continuidad de clases, alumnos y docentes en las aulas,  y padres en sus ocupaciones y en sus casas. Quizás mi mayor mérito haya sido el de acercar a las partes en conflicto, exhortarlas a debatir ideas y a consensuar, aunque deba reconocer que muchas veces no pude alcanzar el éxito tras ingentes esfuerzos.
Quienes en la Escuela representan intereses contrapuestos, deben entender que la educación es una construcción social, donde nadie puede ser excluido. Se puede disentir, nos podemos enojar con quien no piensa como nosotros, lo que no podemos hacer es ver como enemigo a quien disiente. No es posible declamar que la Escuela reivindica los valores de la no discriminación y la integración, cuando, a la par, se ofende o denigra al otro.
En una sociedad sin modelos, el docente debe serlo. Educar en democracia es servir de guía para que el alumno aprenda a pensar por sí, en un marco de protección y seguimiento. No se trata de imponer la voluntad del docente, ni su ideología, se trata de colocar al alumno en la situación de poder discernir y de enfrentar los problemas; de acompañarlo.
Desde el lunes la Escuela tendrá un nuevo Rector, el Lic. Leandro Rodríguez, quien tiene vasta experiencia en gestión educativa, porque, durante seis años, se ha desempeñado como Vicerrector del Turno Tarde. Leandro es inteligente, creativo y emprendedor y, por ser todavía joven, cuenta con el empuje y la fuerza que, en mi caso, he perdido en el camino de la lucha diaria.
Agradezco el esfuerzo y dedicación de los Vicerrectores que me han acompañado, de mis colaboradores directos, y de todos los que, desde sus puestos de trabajo, han aportado para sumar.
El gran compromiso es la Escuela, que nos trasciende a todos. Nuestra responsabilidad son los chicos, a quienes debemos preparar para un mundo cambiante y donde los paradigmas mutan muy rápido.
Un último párrafo para los padres, por cuya insistencia y apoyo llegué a la Rectoría de esta Escuela cuatro años atrás. La Escuela sola es insuficiente. Son ustedes, los padres, quienes tienen que ayudar y comprometerse seriamente en la ardua tarea de educar. Acérquense, conozcan qué piensan las autoridades, háganles llegar sus inquietudes. No nos dejen solos.
Un cálido abrazo para todos y mi recuerdo.