¡Vamos por el Boleto en todo el país!

Hay numerosas clases y sistemas de subsidios o becas para estudiantes pero que resultan bochornosos tanto por lo insuficientes como por el clientelismo con el que se suelen asignar. Si bien casualmente no hay datos estadísticos sobre el costo de estudiar y sobre los niveles de deserción, puede verse en cualquier colegio y en cualquier universidad, la exclusión que genera el aumento de precios, la precarización laboral, la falta de comedores, guarderías, etcétera. Por esto los estudiantes nos organizamos y estamos construyendo el Indicie Estudiantil de Precios (IEP). Para visibilizar esta realidad y entonces ponernos a garantizar la gratuidad y el acceso a la educación pública.

Un ejemplo de aquello es el transporte público y el Boleto Educativo Nacional como una medida urgente, necesaria y justa. En ese camino avanza el movimiento estudiantil por el país y ya se conquistaron en varias provincias, boletos locales. Recientemente la Federación Universitaria de Mar del Plata, a fuerza de participación y movilización, logró presentar su proyecto y ocupar una banca en el consejo deliberante garantizando el tratamiento y la pronta votación del Boleto. En la Ciudad de Buenos Aires ya son cada vez más los sectores y legisladores que apoyan la lucha estudiantil por una tarifa social y estudiantil en el subte.

El gobierno se encuentra ante una disputa por los ingresos donde los sectores concentrados han dado el primer golpe al lograr que devalúe un 56%, lo cual sumado a la creciente inflación y el aumento de tarifas, genera la perdida del poder adquisitivo de los sectores de ingresos fijos. Solo entre enero y febrero, tenemos un millón y medio más de pobres. Incluso la AUH, aún con el último aumento, sigue por debajo del poder adquisitivo que tenia cuando se creó.

Al mismo tiempo, los bancos en tres meses ya ganaron casi lo mismo que en todo 2013. Se reprivatizan los trenes metropolitanos. Se premia a las multinacionales vaciadoras.

En este contexto, reclamamos medidas de emergencia social y educativa. Porque plata hay, el tema es que se hace con ella…

Mientras nos dicen que la plata no alcanza para más, hace un mes se aprobó en diputados, la escandalosa indemnización a Repsol por mas de 10 mil millones. Esto con el voto a favor de todo el kirchnerismo más el MPN neuquino; las abstenciones de la oposición por derecha del PRO, el Frente Renovador y Compromiso Federal; y el voto en contra de todo el arco opositor de centro izquierda encabezado por los integrantes del Frente Amplio UNEN.

El kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires decía que no había plata para los docentes que desarrollaron un histórico paro de 17 días, pero no dudó en lanzar un plan de seguridad de 600 millones.

En otras provincias gobernadas por el oficialismo como el Chaco del jefe de gabinete, Tucumán, o el Santiago del Estero del nuevo presidente provisional del senado, la represión a estudiantes, docentes y movimientos sociales se está volviendo moneda corriente.

Y como plafón para responder a cualquier reclamo ante el ajuste los K y el PRO votaron la ley antiterrorista y ahora quieren prohibir la protesta social. En estos días un periodista que cubría un hecho de abuso policial, esta queriendo ser condenado a través de esta ley del GAFI.

Más plata para la Educación: Con Unidad y participación es posible.

Arriba los estudiantes!

Tenemos una convicción: la educación pública y gratuita es estandarte del proyecto de país justo en el que queremos vivir. También sabemos que Educar es combatir y que vamos a conseguir Más plata para la educación.

Por todo esto necesitamos reconstruir un movimiento estudiantil que sea protagonista. En este sentido, celebramos que la FUBA después de un año, convoque a participar de un reclamo educativo dirigido al gobierno nacional. Pero con la experiencia de los últimos años, sabemos que esto solo no va a significar ninguna conquista. En lugar de permanentes «declaraciones» o marchas esporádicas e improvisadas, la FUBA debería preocuparse en construir unidad, coherencia y propuestas concretas que convoquen y movilicen.

Así, la FUBA debiera preocuparse más por discutir las políticas del gobierno y el rectorado, que por imprimir cientos de miles de volantes dedicados a las agrupaciones que somos críticas a su conducción política y funcionamiento. Así, la FUBA debiera practicar un poco de coherencia y hacer lo que dice y lo que vota. Como publicar un balance de cuentas, como se votó en junta ejecutiva en febrero pasado. Así, la FUBA debiera estar debatiendo una propuesta común del movimiento estudiantil para reformar los estatutos de la UBA, que diga cuál es la representación estudiantil y docente que se reclama, por ejemplo.

Trascender el consignismo y construir una gremialidad en la que con participación, movilización y unidad avancemos en la construcción de consenso sobre reivindicaciones urgentes que nos permitan arrebatar nuestros derechos. Vamos más que nunca por el Boleto Educativo nacional y una tarifa social y estudiantil para el subte. Vamos por Mas presupuesto para la educación!