El papel de la izquierda revolucionaria es junto al proyecto nacional, popular y latinoamericano

“Somos todos de Izquierda…”

Argentina posee una vasta tradición política llamada de Izquierda, centenares de organizaciones que a lo largo de las décadas han alumbrado el camino desde diversas posiciones e identidades y con diferentes denominaciones,  y que en buena medida se ve reflejada en la UBA donde todos los días accionan políticamente decenas de organizaciones que reclaman para sí el mentado rótulo. De esta manera, se impone hoy un interrogante: ¿Qué es ser de Izquierda? Cuál es el contenido concreto que hoy, en un momento en que el imperialismo pugna por imponer nuevamente el neoliberalismo en todo el mundo, debe caracterizar una política de Izquierda?

“Pensá pensá” dice la tele…

Reflexionando sobre el tema, prendemos la TV y casi casi en todos los canales percibimos, al respecto, que izquierda hay una sola y es profundamente opositora al gobierno nacional. Claro, cómo no serlo si es un gobierno “burgués, corrupto, antipopular, derechista (y siempre en permanente derechización)”etc…?  Que curioso que periodistas y medios de esa talla, representantes cabales del capital financiero y amigos de la dictadura militar le den ese lugar a la “izquierda”, e incluso alguno les invite un champansito cuando pasaron las primarias… ¿A qué se debe? Hurgando en busca de respuestas encontramos un librito de un poeta que, con una sencillez envidiable nos dice que “como el mundo es redondo, si uno se corre mucho a la izquierda, termina abrazado a la derecha».

El neoliberalismo y los proyectos populares de la región

Como sabemos, el modelo neoliberal arrasó con América Latina por décadas. El saqueo de los recursos estratégicos, la pobreza, la impunidad para los genocidas, la deuda con el FMI, las privatizaciones y los programas de ajuste fueron la nota característica. La tenaz resistencia de los pueblos, que tuvieron en Cuba Socialista su faro inspirador, culminó en el surgimiento de Gobiernos Populares en todo el continente que se plantaron frente al neoliberalismo. Se resquebraja así la hegemonía mundial de los yanquis abriendo paso a procesos de avance popular, con América Latina a la cabeza. En este marco, ¿cómo no escuchar a Fidel cuando en 2003, desde las escalinatas de Derecho, felicitó al Pueblo Argentino por haber hundido en la fosa del pacífico al símbolo máximo del neoliberalismo en la región representado por el menemismo?  ¿Cómo no revindicar el NO al ALCA con Chávez, Lula y Néstor Kirchner a la cabeza? ¿Cómo no defender la nacionalización de los fondos jubilatorios que, en pleno estallido de la crisis, eran rifados por los especuladores en la timba financiera? ¿Cómo no defender la UNASUR y la CELAC, expresión de un proceso de integración antiimperialista que encuentra a nuestra Presidenta como una protagonista fundamental? En síntesis, ¿cómo autoproclamarse “revolucionario” y no defender al Proyecto Nacional que, encabezado en nuestro país por Néstor y Cristina, entre otras cosas nos permitió avanzar en la lucha contra el monopolio Clarín, la corporación judicial y la recuperación de un recurso estratégico como lo es YPF?

El papel del trotskismo y afines

En este contexto, queda cada vez más claro el papel de aquellos que cacarean por izquierda pero juegan para la derecha, que en nombre del socialismo se negaron a prestar “ningún apoyo a Maduro” en pleno intento de golpe reaccionario en Venezuela o a Cristina cuando en 2008 fue atacada por los medios y la oligarquía, pero no tienen ningún problema en prestárselo a Bloomberg, Nito Artaza, Moyano y la derecha para marchar contra el Gobierno Nacional… Eso si: “con un programa independiente”…También el de aquella marea de “estudiantes independientes” que dicen defender a Evo y a Chávez pero son fervientes opositores al Gobierno Nacional, desconociendo el papel fundamental que jugó Néstor y ahora Cristina en el NO al ALCA, y la conformación de la UNASUR y la CELAC. Ni hablar de quienes, con “Evita y el Che Guevara” se mostraron dispuestos a una alianza con el PRO en caso de que corresponda “defender la República”…

Y en la UBA?

Barbieri, ex decano de económicas con un claro perfil neoliberal, resultó electo rector de la UBA. Y aquí también sorprende como los troskistas y afines hicieron todo lo posible para allanarle el camino y bloquear el surgimiento de una expresión alternativa, intentando impedir la asunción de los decanos anti-barbieristas, fragmentando el movimiento estudiantil rechazando cualquier posible acuerdo sobre la democratización de la UBA y, sorprendentemente, lejos de interrumpir la asamblea universitaria denunciada como ilegítima, acreditando sus consejeros en la misma y garantizando de hecho las condiciones para su realización. En efecto, quedó al descubierto el pacto implícito entre el trotskismo y la franja morada.

Por el contrario, los que vamos por una universidad que vaya en consonancia con el proceso transformador que vive nuestra Patria y nuestro continente, vamos  por un debate de fondo con todos los claustros (que se materializó en el Foro por la Democratización de la UBA) y la construcción de una alternativa política en la UBA, por la reforma de los órganos de cogobierno y la formación de profesionales al servicio del Pueblo y en sintonía con las transformaciones que vive nuestra Patria y el continente.

En síntesis

En momentos donde la derecha pone todo en juego para desestabilizar al Gobierno Nacional, no caben medias tintas ni oposiciones funcionales, por más “de izquierda” que aquellas se proclamen.

Somos el PCCE, la Izquierda que lucha por la liberación nacional y social de la Argentina y que no va a quedarse al margen de la disputa contra el poder real. Sumate a la lucha por defender y profundizar el Proyecto Nacional, Popular y Latinoamericano.