En el día de ayer, pasadas las 10 de la mañana, el presidente de la Universidad Nacional de La Plata, Fernando Tauber, dio el martillazo inicial que determinó el comienzo de las obras que demolerán cerca de 3 mil metros cuadrados del contrafrente del edificio Tres Facultades, lindero al Rectorado, para construir un corredor peatonal amplio y luminoso, de uso público, denominado Pasaje del Bicentenario.
Inaugurada en 1976, iniciada la dictadura militar, la mole de hormigón se constituyó en uno de los símbolos más emblemáticos del poder que ejerció el autoritarismo sobre el sistema de educación superior de la Argentina mediante la persecución de estudiantes y docentes. Más de 30 años después de aquel horror, el Tres Facultades permaneció como recordatorio mudo de aquella época oscura.
El hall central de la ex Facultad de Humanidades de la Universidad de La Plata sirvió de escenario para un acto al que asistieron el intendente de La Plata, Pablo Bruera; el jefe comunal de Ensenada, Mario Secco; y autoridades provinciales, municipales y representantes de toda la comunidad universitarias. Además, estuvo presente la madre de Plaza de Mayo y doctor Honoris Causa de la UNLP, Adelina Dematti de Alaye.
Las autoridades de la casa de altos estudios sostuvieron que esta iniciativa «aparece a los ojos de los platenses como mucho más que una intervención arquitectónica. Es, sin dudas, un acontecimiento histórico y de enorme trascendencia simbólica. Cada ladrillo que caiga a partir de mañana será una reafirmación de los valores de libertad que encarna la Universidad».
«Hoy es un día cargado de mucha emoción porque los recuerdos de una época oscura nos invaden, pero estamos de pie construyendo un futuro mejor. La demolición de parte de este edificio, símbolo de la dictadura, del autoritarismo, del avasallamiento que ejercía avanzando sobre la sede de la presidencia, es una reivindicación histórica para nuestra Universidad y también para nuestra comunidad”, dijo Tauber.
Agregó que “con esta obra vamos a comenzar a recuperar luz, vamos a conocer la cuarta fachada del Rectorado, vamos a recuperar un poco de la dignidad perdida para dar lugar a nuevos espacios del conocimiento”, y cerró su discurso remarcando que “este acto es por la memoria, por la verdad y por la justicia; es ofrendar un ramo de flores para esos 766 compañeros que hoy continúan desaparecidos”.
Fuente: UNLP
