La actividad convocó a más de 500 jóvenes de las distintas agrupaciones que integran Unidos y Organizados, quienes desde las 15 se concentraron en la plaza de La Cárcova para marchar hacia el sitio en que, hace dos años, se produjo la muerte de los dos jóvenes.
Así, los militantes de La Cámpora, Movimiento Evita, Frente Transversal, Corriente Martín Fierro, Peronismo Militante, Nuevo Encuentro, 26 de Julio y Segundo Centenario, entre otras, recordaron la jornada trágica del 3 de febrero de 2011, en la que Franco Almirón y Mauricio Ramos, de 16 y 17 años, fueron asesinados por la Policía Bonaerense luego de que se descarrilara un tren a la vera del barrio.
En el marco de la conmemoración, el diputado nacional Andrés Larroque destacó: «Junto a la militancia estamos como en todos los barrios de la Argentina, sobre todo los más postergados, que hoy se están recuperando a través de las políticas que lleva adelante el gobierno nacional».
En diálogo con Télam, el legislador y secretario general de La Cámpora agregó que el objetivo de las jornadas fue que «casos como los de La Cárcova no ocurran mas acá ni en ningún otro barrio», pero aclaró que «para eso se necesita una actitud comprometida desde el gobierno de la Provincia; de una profunda transformación en la cabeza de las Fuerzas de Seguridad y por supuesto de una militancia organizada que le marque al poder político lo que falta, dónde hay carencias y dónde hay abusos».
Por otra parte, destacó que «si no hubiese estado la militancia desde el primer día, la denuncia y todo lo que se ha conocido de este caso no hubiera existido».
En tanto el vicegobernador bonaerense, Gabriel Mariotto, evocó que en el primer aniversario de los crímenes «con mucho dolor por los compañeros asesinados, pusimos una palabra de reflexión porque no se podía tolerar que el mismo jefe de la Departamental estuviera al frente de esa institución policial de la zona. Y el Poder Ejecutivo respondió removiéndolo, y fue un avance de los tantos que necesitamos para que no haya connivencia con ese accionar judicial».
También evocó, en diálogo con este medio, los avances conquistados a partir de la posterior sanción de un paquete de leyes aunque bregó por la plena sanción de la reforma del Consejo de la Magistratura bonaerense, porque «no puede ser que las corporaciones se voten entre sí y se reproduzca la familia judicial, y la sociedad mirando de costado y después tirándose del pelo cuando vienen esos fallos que nos alertan sobre un funcionamiento oscuro».
Edgardo Binstock, referente del Movimiento Evita y ex Secretario de Derechos Humanos de la Provincia, destacó el rol de la militancia en la visibilización de estos casos de violencia institucional, y dijo a Télam que para prevenirlos «deben actuar los organismos de seguridad y tiene que haber un fuerte control sobre las fuerzas, con la participación de la comunidad, a través de foros de participación que no sean testimoniales y que tengan una recepción».
A la jornada de cierre de las jornadas también se sumaron los diputados nacionales Edgardo Depetri y Leonardo Grosso, los legisladores provinciales Fernando «Chino» Navarro y Miguel Funes, y el referente de Kolina Andrés La Blunda, entre otros.
También asistió el intendente de San Martín, Gabriel Katopodis, quien recibió el agradecimiento de los familiares de las víctimas y bregó -en diálogo con Télam- por «garantizar que todos los días haya oportunidades para estos chicos y que no tengan como referencia a una policía que vulnera derechos», al tiempo que resaltó: «Por esa razón necesitamos una fuerza comprometida con los valores democráticos».
A su turno la tía de Joaquín Romero, único sobreviviente del hecho y que recibió disparos en la espalda la trágica jornada del 3 de febrero, le cuestionó al ministro de Seguridad bonaerense, Ricardo Casal, que haya dicho que «existían bandas organizadas para saquear trenes» cuando se produjo el episodio.
«Acá sí hay bandas, pero de pibes y pibas que llueva, haga frío o calor se dirigen a diario al Ceamse en sus bicicletas en búsqueda de sus alimentos. Y recuerde, ningún pibe nace chorro», dijo la mujer refiriéndose a Casal.
La actividad del domingo incluyó un espectáculo musical y la pintura de murales en las paredes que rodean un espacio central del barrio, denominado «La Canchita», sitio en el que desde ayer se encuentran montados una serie de stands, entre ellos uno que aborda la problemática de la violencia institucional, en el cual se proyectó un video de Unidos y Organizados en contra de esa práctica a través de una serie de ejemplos.
A su vez, se continuó con los talleres de salud y violencia institucional; mientras que un grupo de militantes pasó la noche en la Escuela 51 del barrio, desde donde esta mañana reiniciaron las intensas actividades que incluyeron la limpieza y el zanjeo de calles del barrio y la pintada de los murales.
TELAM